Juan Carlos Osorio, del histórico triunfo a Alemania en Rusia 2018 a tocar fondo

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Osorio festeja la victoria ante Alemania en Rusia 2018. | Archivo

Hay fechas que quedan para la eternidad. El 17 de junio de 2018 será, para Juan Carlos Osorio, un día de nunca olvidar. Y no es para menos. En su primera cita mundialista, bajo la dirección técnica de la selección mexicana, el estratega colombiano le mandó un aviso mayúsculo al mundo del deporte venciendo 1-0 a la entonces vigente campeona del planeta, Alemania. El tanto de Hirving Lozano, a los 35’, fue más que suficiente para poner dicho Mundial ‘patas arriba’. Y Osorio, sin querer queriendo, terminó tocando el cielo.

Y es que no cualquier técnico debuta en un Mundial ante el vigente campeón del mundo y lo vence. Es como si se alinearan los planetas. Por fortuna, para Osorio, Rusia 2018 se encuentra tatuado en su piel, pese a que ese sueño se truncó el 2 de julio, al caer en los octavos de final ante la Brasil de Neymar. Días después, su ciclo en el combinado azteca también terminó teniendo su punto final.

Poco o nada vale tocar la cima. De hecho, muchos pueden alcanzarla, pero una minoría permanece en ella. Lastimosamente, el ‘Míster’ hizo parte del primer grupo, o al menos así lo ha reflejado su carrera postriunfo ante los europeos. Cualquier reto ha surgido y en todos ha salido por la puerta de atrás. El último de ellos, el Athletico Paranaense de Brasil, que este domingo confirmó su destitución luego de caer 1-0 en la visita a Londrina, en los cuartos de final del campeonato estatal.

Pero no sólo Brasil ha sido el país que ha visto una versión un poco desconfigurada de Osorio. Lo dicho anteriormente. Su salida de México le hizo caer en picada. No alcanzó la misma gloria con la Selección Paraguay, en donde sólo alcanzó a dirigir un encuentro. Tampoco en el FPC. Ni con Atlético Nacional, con quien firmó un ciclo dorado durante el 2012-15. Menos en el América de Cali. En Egipto, con el Zamalek, alcanzó a sacar la cabeza del agua, pero acabó por fuera… y ahora el Paranaense, que a pesar de su gran rendimiento (sólo una derrota en 11 juegos), su salida se produce por otros motivos.

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