Impotencia, broncas y poco juego: flojo rendimiento de las estrellas del Inter Miami frente a Rayados

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Rayados le ganó 3 a 1 a Inter Miami en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Concacaf Champions Cup, global 5-2, y de esa manera se clasificó a una de las semifinales de la competencia en la qu se medirá con Colombus Crew. En esto de las formas de ganar o perder, llamó poderosísimamente la atención la notable diferencia de nivel físico y ritmo entre el equipo mexicano y el estadounidense, algo que si bien en el duelo de ida por momentos había quedado expuesto, se esperaba que el Inter pudiera contrarestarlo.

El Miami apeló a la experiencia y jerarquía de sus estrellas, Leo Messi, Luis Suárez, Jordi Alba y Sergio Busquets. De los cuatro, el único que rindió fue el volante, quien jugó mal acompañado por un Julian Gressel errático y poco inteligente, y un Diego Gómez que por momentos no se mostraba siquiera como opción de juego. El caso fue que Messi no estuvo a la altura de la exigencia, más allá de algún que otro chispazo y situación de gol, en el primer tiempo pateando encima del travesaño. También es verdad es que volvía a ser titular luego de un mes aproximadamente y que venía de sumar minutos recién días atrás en la MLS, de ahí la poca influencia en el juego y resultado.

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Sergio Busquets, el mejor de las estrellas. | Imago 7

Luis Suárez estuvo muy fastidioso desde el primer minuto, y eso estuvo algo motivado en su falta de ritmo. Se lo vio más lento de que de costumbre en la lectura del juego, fue generalmente anticipado y discutía mucho con los defensores rivales. Producto de la impotencia llegó a ser amonestado por hacer un gesto con una de sus manos que responde al tema dinero, y siquiera tuvo un tiro al arco, en gran parte por su bajo nivel y en otra por el grandísimo trabajo de la última línea.

Jordi Alba estuvo lejos de su forma. Pasó poco al ataque y cuando lo hizo fue siempre neutralizado por la defensa. El lateral español estaba totalmente desencajado, un poco por los errores insólitos de la defensa, que se “hizo dos goles”, y tras eso nunca pudo mentalmente salir de ahí, algo que quedó expuesto cuando le pegó casi sin pelota a Medina y vio la amarilla, y cuando minutos después de esa acción fue expulsado por doble amonestación.

Como decíamos, Busquets fue claramente el mejor de los ‘galácticos’, repartiendo el juego, pero esta vez los receptores de sus pases, tanto para atrás como para adelante no la vieron. Mal partido del Inter Miami por ende y ahora, tal como manifestó Martino, el objetivo se pone en la MLS. El equipo nunca ganó el título ni tampoco clasificó a las fases finales, por lo que se pone en modo torneo local, sabiendo que deberá rápidamente cambiar la cabeza para afrontar lo que viene.

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