Aficionados del PSV interrumpen con bengalas el final del duelo ante el Heerenveen

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En un partido que estaba destinado a ser una celebración para el PSV, la jornada 31 de la Eredivisie entre el Heerenveen y el equipo de Eindhoven se vio empañada por la interrupción causada por sus propios aficionados. El encuentro, que se encontraba en el minuto 89 con el PSV ganando de manera aplastante por 0-8, fue suspendido momentáneamente debido a la gran cantidad de bengalas encendidas en la sección visitante de las gradas.

El PSV, con una actuación dominante en el campo, estaba prácticamente asegurando su título número 25 de la Eredivisie. Sin embargo, la interrupción ocurrió cuando los árbitros se vieron obligados a detener el juego por razones de seguridad y visibilidad. El humo generado por las bengalas dificultaba la visión en el estadio, creando un entorno peligroso para jugadores y árbitros.

La suspensión del partido fue un momento desconcertante, especialmente considerando que el PSV estaba a solo minutos de confirmar una contundente victoria. El árbitro decidió suspender el partido por cinco minutos, esperando a que el humo se disipara y permitiera reanudar el juego. Cuando finalmente se reanudó, solo transcurrieron unos pocos segundos antes de que el árbitro concluyera el encuentro en el minuto 90, sin tiempo de compensación.

Los clubes de la Eredivisie, así como las autoridades del fútbol holandés, han mostrado su preocupación por la creciente tendencia de encender bengalas y otros artefactos pirotécnicos en los estadios, y ha dejado de tratarse de casos aislados.

Para el PSV, la victoria prácticamente asegura el título, pero el incidente en Heerenveen pone de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y concienciar a los aficionados sobre las consecuencias de su comportamiento.

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