De La Guajira a Bogotá: la historia de Iván Vega, el hincha que cumplió el sueño de ver a Santa Fe en El Campín

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Ivan Santa Fe
Iván Vega, hincha guajiro de Santa Fe – Foto: @Ivanvega0628

Claro Sports Colombia se dio a la tarea de hablar con Iván Vega, el hincha de Independiente Santa Fe, quien a pesar de la larga distancia que hay entre la La Gaujira y Bogotá, ha seguido al ‘León’ durante mucho tiempo. Dialogamos con él sobre su sueño cumplido, el de ver jugar al equipo de sus amores por primera vez y cómo se dio su llegada a la capital para entrar a El Campín, ese que muchas veces vio por televisión pero que por fin pudo vivir en carne propia.

¿De dónde es y a qué se dedica?

“Yo soy de Maicao, La Guajira, viví un tiempo en Lorica y Montería Córdoba y en Valledupar que es donde más tiempo viví, actualmente estoy en San Juan del César, que es prácticamente La Guajira así su nombre diga que es del César. Trabajo como auxiliar administrativo de un centro radiológico, me encargo de los ingresos de los pacientes”.

¿De dónde nace el amor por Santa Fe?

“Mi papá es hincha de Santa Fe desde los 10 años, él me decía que escuchara a Pache Andrade en la radio relatando los partidos del equipo y que a él le gustaba cómo narraban y cómo cantaban los goles, ahí fue agarrándole amor al equipo, me lo transmitió a mí y a mi hermana, pero a mi hermana le ganó la Costa y se pasó para Junior. Pero a mí siempre me gustó el equipo, e inclusive en todo el tiempo que el que duró con escasez de títulos, tiempo después ya podía ver los partidos en Futbolmanía de RCN, los internacionales si me tocaba ir donde los vecinos, alguien cercano que tuviera tv-cable para verlos; siempre estuve pendiente del equipo por radio o televisión, el amor siempre estuvo allí, el recuerdo más bonito que tuve fue cuando salimos campeones de la Copa Colombia, para esa época estaba en Montería y como decía la historia, yo aposté con el señor de la tienda porque me ‘mamaba gallo’ porque él era de Nacional y yo de Santa Fe, en aquel tiempo salió en el periódico la portada del título, allí me gané ese afiche”.

¿Cómo fue la época de colegio rodeado de hinchas de otros clubes?

“Con todo tipo de personas siempre hubo la burla, porque todo el mundo me puntaba y me decía ‘¿a caso tú eres cachaco?, ¿por qué de Santa Fe?’. Pero acá en Valledupar es otra cuestión porque acá todo el mundo es de Junior, habían unos cuantos de Nacional, otros de América, todo el mundo piensa que en la Costa solo hay hinchas de Junior, pero no, porque también hay de otros equipos, pero de Santa Fe sí era el único, tener que escudarme y protegerme de eso… Pero cuando todos me decían que por qué era de Santa Fe si no nací en Bogotá, yo les respondí que ustedes por qué eran de Junior si tampoco habían ido a Barranquilla nunca y eso que está más cerca, esa era mi defensa, yo siempre estuvo con el amor a mi equipo, yo no hcie la fácil que porque se me burlan o porque acá todo el mundo es de Junior me voy a pasar, el amor al equipo es como el amor a la mamá para toda la vida, el que se cambie nunca fue hincha de ese equipo”.

El cambio de sede de Alianza a Valledupar despertó el sueño de poder ver a Santa Fe por primera vez

“Yo a usted le soy sincero, no sé si usted supo, me imagino que sí, que los rumores que algún equipo de Primera División jugara en Valledupar eran altos, empezaron con Águilas pero finalmente resultó llegando Alianza, yo estaba full emocionado, le compartí la información a mi tía ya que ella es bastante futbolera, ella me acompañó al partido en Valledupar, a pesar de que es hincha de Junior. Pero la emoción estaba latente yo decía ‘ahora sí se me dio la oportunidad de tenerlo aquí cerca’, pero cuando ya fue oficial lo de Alianza, yo celebré eso como si fuera un título en mi casa”.

La emoción de ver a Santa Fe por primera vez: 03 de marzo del 2024

“Cuando vi el fixture que nos tocaba acá en primer semestre en Valledupar, yo dice ‘voy porque voy’, le decía a todo mundo ‘yo voy como sea así me toque irme desde acá a pie’ yo ya estaba programado. Pero como no todo es color de rosa, un día antes de que fuera el partido un señor que iba a viajar para el Valle, me quedé con la maleta hecha porque él no fue, pero al día siguiente conseguí prestado porque no quería ir solo, yo quería ir con mi bufanda, algo alusivo del equipo, quería hacerme con occidental para ver a los jugadores pero no me alcanzó y me tocó en oriental porque no hubo presupuesto para más, pero nos tocó en oriental, aunque fue lo mejor porque ahí estaba la gente que había venido desde Bogotá y estuve cerca de la fiesta”.

La conexión con Theo González, el artífice del sueño

“Al final del partido todo fue como mágico. Santa Fe gana un partido con nueve jugadores, vistiendo de amarillo, estaba con el tercer uniforme, esos colores eran los que tenía Alianza en Barrancabermeja, pero como se cambió de ciudad, el aguante del equipo fue épico. Cuando yo llego a la casa comparto las imágenes que había visto por primera vez a Santa Fe y estaba feliz porque ganamos a pesar de tener solo nueve jugadores, me ocupo un rato y cuando reviso el celular nuevamente estaba estallado con gente diciendo que no me creían que yo siendo guajiro fuera de Santa Fe, pero cuando todo el mundo diciendo que a ese muchacho hay que traerlo (a Bogotá) y empezaron a citar a Theo, yo ya sabía que era el encargado de la información de Santa Fe, él me terminó escribiendo y yo ‘uy es en serio’ me pidió el número, empezamos a hablar sobre la historia de Santa Fe, el resto fue épico. El para mí es una persona súper especial, porque hizo toda la gestión, la organización, todo lo promediado, no tengo cómo describir todo el aprecio que le tengo hoy en día”

La hinchada se movió para cumplirle el sueño de estar en El Campín

Después de todo lo que había movido la historia de Theo González, se organizó una ‘Vaki’ para que Iván pudiera venir a Bogotá a ver a Santa Fe: “Yo al trabajo me voy temprano siempre, todos empezaron a decir que le mandáramos plata al Nequi, pero yo les dije que ‘no porque no estoy seguro si voy a ir’ y que depronto digan que uno se quedó con la plata entonces no… Theo se encargó de todo. Al otro día me levanto y en menos de 8 horas la cuestión ya iba en dos millones de pesos, al mediodía ya iba en 3.5 millones de pesos eso ya había superado la meta y como que wow de verdad la gente quiere que yo vaya, además la motivación de muchos era que mi papá cumplía años y qué mejor que ir a Bogotá con el que me inculcó querer los colores del club, yo no cabía del asombro. Él después me envía lo de los tíquetes yo dije ‘yo voy a conocer Bogotá, al menos el vuelo está asegurado’. Mi papá tampoco creía que fuera verdad hasta que le envío los tiquetes, ay nos fuimos”.

La ansiedad por estar en El Campín por primera vez

“Nosotros llegamos el viernes en la noche, yo estaba nervioso, me temblaban las manos, no sabía cómo contenerme, cuando ya estábamos en la cuestión del partido, yo me voy acercando al Palacio del Colesterol y empieza ese poco de gente ‘ey costa, Iván, ven para acá’ yo dije ‘pero es que acá todo el mundo me conoce, qué es esto’, allí la pasamos muy chévere. Ya cuando tocó entrar al estadio yo pensé que me iba a poner a llorar de la emoción, pero ver ese estadio tan grande repleto de gente y además el envión anímico por haberle ganado a Fortaleza, yo dije que me tocó el partido perfecto prácticamente”.

“Yo no me sabía las canciones que cantaba La Guardia, pero ahí trataba de meterme en el ambiente de la gente de los cánticos, todo fue muy bacano. Lo que me gustó fue que empezamos perdiendo y la gente no se quedó resignada porque perdíamos, por el contrario la gente comenzó a cantar más duro, a saltar, eso fue muy bonito. Yo veía a ea barra y decía ‘esta gente se toma cuatro vive 100 antes de entrar al partido jajaja, no joda, nunca se callaron’, el marco fue espectacular”.

“En medio del partido, por gracioso que suene, yo decía ‘Dios mío que no vayamos a perder’, porque todo lo que esperé para poder ver al equipo, el ambiente de la gente, eso era yo lo que pensaba, pero ya lo del empate fue bueno, a mí los desconocidos me abrazaban, me apretujaban de la emoción. Primer tiempo vi un mediocampo desconcentrado pero era porque Tolima también es un gran equipo, pero el profe al segundo tiempo con los cambios modificó todo con Jersson y Perlaza, fácilmente pudimos ganar 3-1″.

¿Qué le quedó de la experiencia?

“Me quedo con la garra del equipo, que no se dio por vencido y a pesar de ir perdiendo nunca bajaron los brazos y buscaron empatar y hasta ganar el partido. Me quedo con esa gente que me apoyó para cumplir el sueño, con los que me abrieron los brazos en Bogotá y me hicieron sentir uno más de ellos, el cariño de la gente es algo que no tiene precio de verdad. Cuando salí del estadio yo no asimilaba todavía todo lo que había vivido, porque por tantos años lo soñé, yo decía ojalá algún día se me cumpliera y por fin lo había logrado”.

Los jugadores le cantaron el feliz cumpleaños a mi papá

“Adentro en el estadio me hice con la gente de Sangreal, allá ya varios me conocían y me abrazaban. Después que salí, estuvimos un rato en el Palacio, nos tomamos la famosa pola, bueno ya me tocó ir a cumplir otros compromisos, porque con el señor Fabián Torres le tenían la sorpresa de que mi papá y yo conociéramos a Hugo Rodallega y a Juan Pablo Zuluaga. Después veo que le tienen una torta a él con el escudo de y veo entrar a Hugo, cualquiera se quita el escudo de Santa Fe y quiere conocerlo, es un señorazo, un personaje, un jugador que estuvo mucho tiempo por fuera de Colombia, ¿a quién no le gustaría conocerlo independientemente de los colores?, fue una sorpresa muy bonita”.

El sueño de conocer a Ómar Pérez también se le cumplió

“Agradecimiento a unas amigas que hice en Bogotá, quienes fueron las que me ayudaron a cumplir ese sueño las dos se llaman Ana María, estaba Theo, su novia la señorita Paula, el señor Fabián y cuando vamos llegando yo tenía muchos nervios, cuando llegó y veo esa colección de camisetas eso es para el que le gusta el fútbol es un parque de diversiones, la temática de Argentina, nos enseñan partes del lugar. Cuando yo veo a ese tipo, yo no sabía ni qué decirle, lo abrazaba, nos tomamos fotos y él fue muy amable. Pero si yo ya había cumplido el sueño principal que era ver a Santa Fe en El Campín, ahora conocer a Ómar fue decir que no me la creía”.

¿Cuándo vuelve?

“No quiero abusar de la hospitalidad y generosidad de la gente, la próxima vez que vaya va a ser por mis propios medios y ojalá para vivir una final con toda la gente que me acompañó para disfrutar un título de Santa Fe, eso sería para volverme loco. Me quedó pendiente la tarea de entrar a sur, e incluso cuando yo estuve en Valledupar contra Alianza, ellos me dijeron que cuando estuviera en Bogotá ellos me daban boleta, pero por ejemplo en esta oportunidad venía con mi papá, pero cuando yo vaya solo ¿a quién no le gustaría vivir esa fiesta? donde es el centro de todo el carnaval, los que aguantan y acompañan en todo el momento al equipo”.

Un Santa Fe que tiene pinta…

“A los jugadores les digo que muchas gracias por todo lo que hicieron por mí y por mi papá. Pero también que se den cuenta de todo lo que han hecho por el equipo, que no solo son resultados, han unido familias, niños para que los acompañen, que sigan por esa senda de los buenos resultados, que Dios quiera vamos a tener ese título y que por mi parte así me toque a la distancia por celular, tablet, ‘gorriar’ donde un vecino que me deje ver los partidos ahí voy a estar pendiente. Que a todo el mundo le quede claro que Santa Fe es, ha sido y siempre será la fuerza de un pueblo”.

El mensaje para la hinchada de Santa Fe:

“Le agradezco al exarquero Leandro Castellanos, el capi, también me recibió en un lugar y me regaló los guantes con los que alguna vez atajó, entonces le quiero enviar un saludo muy grande a él. Al resto de la gente ya no sé qué más decirle, estoy infinitamente agradecido con ellos porque hicieron realidad este sueño que parecía imposible, conmovido por todo lo que hicieron por mí y por mi papá, nos demostraron que la unión hace la fuerza. Al gran Theo González por todo lo que hizo. Al señor Mario que nos recogió en el hotel y nos hizo un tour por la ciudad. Ana María, César que me regló las boletas, a la voz del estadio que también lo pude conocer, a Fabián Torres gracias por la hospitalidad. Me quedo con los bonitos gestos de la gente, mil y mil gracias por esto que me marcó para toda la vida”.

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