El Napoli noquea al Empoli y a Devis Vásquez

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La Serie A tendrá un final de infarto. Y Napoli será, sin duda, el gran rival del Inter de Milán. Los de Antonio Conte han hecho de las suyas este lunes en el cierre de la jornada 32 ante el Empoli de Devis Vásquez. En lo que fuese un monólogo del elenco del sur de Italia, McTominay fue el encargado de poner la música en el Diego Armando Maradona, firmando un doblete. Además, Lukaku también dijo presente. Sólo tres puntos separan al Napoli del Inter, y aún hay 18 unidades en juego.

El Napoli se ha ganado el derecho a soñar con su cuarto ‘Scudetto’. A Conte le gustan los retos complicados. Y el Napoli era uno de los más difíciles de su carrera después de la desastrosa temporada pasada, en donde los napolitanos quedaron fuera de competiciones europeas. Sin Osimhen y, desde enero sin Kvaratskhelia, el técnico ha generado un clima en el que el equipo vuelve a sentirse competitivo.

Y en este sentido gran culpa tiene la pareja de moda en la ciudad sureña de Italia, la que forman un escocés recién llegado y un belga que bajo las órdenes de Conte siempre rinde. Son nueve goles y dos asistencias las de McTominay en lo que va de campaña; y 12 goles y nueve asistencias para Lukaku, el mejor del duelo ante el Empoli.

Porque suya fue la entrega cuando estaba rodeado por dos defensores en el centro del campo, pegado a los banquillos, la que le permitió encontrar a McTominay libre para que el escocés, sobrado de confianza, abriera el marcador en el minuto 18 con un disparo desde la frontal del área. Porque suyo fue el segundo gol, el de la tranquilidad, cuando en una baldosa en el minuto 56 recibió del uruguayo Mathías Olivera, controló con su zurda y definió al palo corto con el mismo pie. Y porque suya fue la asistencia en el minuto 61 para la sentencia, de nuevo a McTominay, con un centro medido desde el perfil zurdo que el ex del United remató con facilidad en una tarde que pudo ser más feliz para él si el palo no hubiera ‘besado’ su disparo cuando saboreaba el triplete.

Poco pudo hacer el Empoli, semifinalista de la Coppa, para frenar el vendaval de los locales en el Diego Armando Maradona. Aplaudió Conte frenéticamente cada acción de los suyos, cada balón dividido ganado, cada jugada hilvanada con sentido, consciente de que puede repetir la hazaña que logró el astro argentino en finales de los 80’ y que repitieron Luciano Spalletti, Osimhen y ‘Kvara’ en 2023, aunque con un vestuario y un equipo que nadie tomó como candidato, que tuvo que pulir a su medida para que fuera competitivo.

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