Uziel Muñoz proyecta su histórico impulso hacia los Juegos Olímpicos de Los Angeles 2028

El subcampeón mundial habló en su regreso a México de la revancha cumplida en Tokio y de las expectativas para el ciclo olímpico

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El atleta mexicano Uziel Muñoz, originario de Chihuahua, regresó este 16 de septiembre a la Ciudad de México tras conquistar la medalla de plata en impulso de bala en el Campeonato Mundial de Atletismo de Tokyo 2025, con un lanzamiento de 21.97 metros que lo convirtió en el primer latinoamericano en subir al podio en esta disciplina. 

La hazaña cobra un valor adicional porque Muñoz llegó al evento en medio de obstáculos administrativos y físicos: la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo no lo tenía contemplado en sus listas oficiales, y apenas cinco meses antes había sido operado del tobillo. A pesar de ello, logró una de las preseas más relevantes en la historia del atletismo mexicano, la número 14 en campeonatos mundiales, y la primera en pruebas de lanzamientos al aire libre.

El subcampeón mundial habló en exclusiva para Claro Sports de la trascendencia de su logro, de las dificultades que enfrentó para competir, de las promesas cumplidas y de cómo su equipo cercano resultó clave en una temporada marcada por la adversidad. En su llegada al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, destacó el significado de esta revancha en Tokio, el papel de su hermano Mateo como inspiración, la importancia de su entrenador y la confianza que le da estar ya en la élite rumbo al ciclo olímpico que culminará en Los Angeles 2028.

El orgullo de volver con medalla en el mes patrio

En su llegada a México, Muñoz no ocultó la carga simbólica de haber conseguido el logro histórico justo en septiembre, un mes que además coincide con su cumpleaños. El atleta quiso subrayar que la conquista va más allá de lo personal, pues encierra un significado colectivo que conecta con las fechas patrias y con la identidad nacional, algo que lo emociona tanto como el resultado deportivo en sí mismo.

“Muy contento, muy feliz, ya que es algo que se venía trabajando ya de muchos años y que se diera en el mes de mi cumpleaños, en el mes patrio, pues yo creo que representa más para México que para todos nosotros”.

Una final de élite mundial

El subcampeón reconoció que la final en Tokio representó una de las pruebas más exigentes de su carrera, con siete lanzadores por encima de los 21 metros. En ese escenario de máxima presión, relató que eligió construir su desempeño paso a paso, concentrándose en el momento justo para explotar su mejor tiro. Con esa estrategia consiguió superar obstáculos y asegurar un resultado inédito para México y para América Latina.

“En este evento la final estaba muy fuerte. Nosotros fuimos construyendo paso a paso hasta lograrlo. A ellos no se les dio su momento. Yo lo trabajé y logramos este resultado. Un hecho histórico. Ningún latinoamericano había ganado una medalla mundial en esta especialidad y tú lo consigues y bueno, demostrando que estás en la élite de esta especialidad”.

La dificultad no está en llegar, sino en sostenerse

Más allá de la euforia por el podio, Muñoz destacó que lo realmente complejo en el alto rendimiento es permanecer en la élite. Según explicó, cada temporada exige preparación más completa y capacidad de adaptación, algo que su equipo ya asumió como parte del proceso. Para él, lo importante no es solo haber abierto camino, sino mantenerlo para que México continúe obteniendo resultados.

“Comprobando que lo fácil no es llegar, sino mantenerse. Y creo que año con año lo vamos a venir haciendo de una mejor forma. Estamos mejor preparados, seguimos trabajando, estamos informados, así que creo que vienen grandes resultados para México en estos días”.

Una revancha personal con Tokio

En el recuerdo del atleta seguía latente la espina de no haber podido debutar en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2021. Por eso, llegar a ese mismo escenario y salir como medallista mundial adquirió un valor de revancha personal y deportiva. Desde antes de viajar, compartió con su entrenador que la cita estaba pendiente y que asumiría cada lanzamiento como si estuviera en unos Olímpicos.

“Yo le comenté a mi entrenador que tenía una cita pendiente en Tokio, ya que por azares del destino yo no pude debutar en Tokyo 2021. Le dije, ‘Ahorita es mi momento, tengo un una cita pendiente en este mismo círculo’ y salí con esas ganas de trabajarlo como si hubiera sido en los Juegos Olímpicos. Creo que se dio el resultado de la mejor forma, trabajándolo lanzamiento tras lanzamiento y haciendo el trabajo”.

El obstáculo de la cirugía de tobillo

A principios de 2025, el mexicano fue operado del tobillo y apenas pudo entrenar cinco meses antes del Mundial. Ese contratiempo lo obligó a redefinir su preparación, pero en lugar de verlo como un límite, lo asumió como un proceso para fortalecer su ejecución. Destacó que esa lesión, que no le permitía trabajar al cien por ciento, terminó empujándolo hacia entrenamientos de mayor calidad y a una mentalidad más firme para encarar el ciclo olímpico rumbo a Los Angeles 2028.

“Era una lesión que no me dejaba hacer mi ejecución completamente. Yo sabía que era poco entrenamiento, pero era un entrenamiento de calidad. Regresamos eh con la mentalidad más firme, con mayor confianza, mejor ejecución y creo que se dio. Este es el comienzo del del siguiente ciclo olímpico y nos deja muy grandes expectativas para Los Angeles 2028”.

Pensando en Los Ángeles 2028

Muñoz explicó que, aunque no puede garantizar una medalla olímpica, sí tiene claro que buscará estar en zona de podio, lanzando por encima del récord mexicano. Señaló que los resultados dependen de la preparación y del momento, pero se mostró convencido de que México estará representado con nivel competitivo en la siguiente cita.

“Yo tengo expectativas en metros, que es nuestro trabajo, podemos planificar y podemos trabajar para eso, pero los resultados se dan en el momento. Yo no te puedo decir que voy a hacer medalla en Los Ángeles, pero sí te puedo decir que voy a estar tirando arriba del récord mexicano y eso nos pone en zona de medallas. ¿Qué color? Puede ser que no alcanzamos medalla, puede ser que sea récord olímpico”.

La inspiración de Mateo

Uno de los momentos más emotivos fue cuando habló de su hermano Mateo, figura que ha sido motor y anclaje en su carrera. Recordó la promesa que le hizo en 2017 y que no pudo cumplir en 2021, pero que ahora sí se concretó con la medalla de plata en Japón. El chihuahuense dedicó el logro a su hermano.

“Siempre fue un anclaje que me ayudó a sobrellevar mis entrenamientos, mis competencias. Y cuando llegué a la pista, que vi al estadio le dije, ‘Aquí fue la promesa que yo en el 2017 le dije. En 2021 no se nos dio, pero hoy estamos aquí y te lo estoy demostrando. Año con año te sigo demostrando que la promesa sigue en pie y pues de la mejor forma se lo pude demostrar, con la plata. Agradecerle al cielo, agradecerle a él, ese es el mejor sabor de boca que me queda”.

El rol del entrenador y del equipo

El medallista enfatizó que su éxito no es individual, sino fruto del trabajo conjunto. Destacó la figura de su entrenador, a quien definió como alguien disponible a toda hora, así como al equipo multidisciplinario que respalda cada sesión, cada viaje y cada ajuste en la preparación. Para él, la medalla simboliza también la constancia silenciosa de quienes están detrás del resultado.

“Pues al final de cuentas somos un equipo. Este es un trabajo en conjunto, no soy solo yo compitiendo, hay un equipo detrás de mí, hay un equipo que está 24/7 sobre el entrenamiento. El trabajo que hacemos en silencio es un entrenamiento 24/7. Somos atletas comprometidos, somos atletas completos. Entrenamos por la noche. Llueve, relampaguea, estamos entrenando y pues es parte fundamental de estos resultados. No es nada más un yo, sino hay un equipo multidisciplinario atrás que que se que trabajó para lograr este resultado”.

Superar obstáculos logísticos

El Mundial de Muñoz también estuvo marcado por dificultades fuera de la pista: problemas de inscripción y falta de uniformes que complicaron su participación en el certamen. Ante ello, aseguró que eligió no concentrarse en lo negativo y aprovechar la oportunidad de entrenar en Hiroshima para adaptarse a las condiciones climáticas. Esa decisión, dijo, fue clave para mantenerse enfocado y rendir en la competencia.

“Es una línea muy delgada en de cómo ven las cosas las personas. Yo tomé la oportunidad y trabajé para desarrollarme de la mejor manera. No enfocándome en lo negativo, sino en lo positivo que era que pude estar una semana previa a la entrada al hotel haciendo un campamento en Hiroshima, adaptándome al calor, a la humedad, al cambio de horario. Yo me enfoqué en las cosas positivas. Yo estaba enfocado, yo sabía que todo se iba a solucionar. Ese enfoque que tuvimos nos dio la ventaja de poder estar compitiendo de mejor forma”.

Un nuevo capítulo para los lanzamientos en México

Tras el histórico logro, el atleta reveló que hay acercamientos con las autoridades deportivas  para trabajar de cara a la siguiente temporada y aseguró que percibe un interés renovado en los lanzamientos, lo que podría convertir a esta disciplina en un semillero de preseas para las próximas generaciones de atletas mexicanos.

“Sí, ya tuvimos ahí un acercamiento para la siguiente temporada y yo creo que va a ser de la mejor manera la sinergia que se que se está realizando. Creo que viene un cambio para México en los lanzamientos. A muchos les está interesando este deporte y creo que va a ser la siguiente cuna de medallas en las siguientes generaciones“.

Mensaje final al público mexicano

Al cerrar la charla, el subcampeón mundial quiso dedicar unas palabras a la afición mexicana, reconociendo que el triunfo no es sólo suyo sino de todo el país. Invitó a la gente a disfrutar la medalla tanto como él y agradeció el apoyo que sintió en el Mundial.

“Pues que le echen ganas y muchas gracias por todo el apoyo que recibí ahí en Tokio. Este resultado no es solo mío, sino es para todo México y espero que lo disfruten de la misma manera que lo estoy disfrutando yo“.

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