Independiente Medellín da la pelea y va a la final: las claves del triunfo sobre Deportes Tolima

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Juan David Arizala fue el héroe del Poderoso con un gol en el tiempo de adición que alivió la angustia general.

Jugadores de Independiente Medellín celebran un gol. - Vizzoer Image.
Jugadores de Independiente Medellín celebran un gol. – Vizzoer Image.

Este era un duelo que merecía todas las miradas del fútbol colombiano encima. Independiente Medellín llegó a la quinta jornada de los cuadrangulares con la primera opción de clasificar a la final de la Liga BetPlay Dimayor 2025-I. Su reto para cumplir el objetivo era vencer a un Deportes Tolima que llegaba con su última oportunidad de seguir con vida.

No es de lanzar golpes

Se dio un inicio con propuesta ofensiva de ambos lados, pero la de la visita conseguía profundidad y pisar el área. La dificultad pasaba porque no encontraban espacio ni posición ideal para remates directos al arco, pero el que parecía más cerca de anotar era el cuadro vinotinto.

Impredecible, como es el fútbol en sí, llegó el gol del Medellín. El encargado de regalar un golazo fue Léider Berrío, con un misil de unos 25 metros que se fue directo hacia un ángulo superior de la portería y abrió el marcador al minuto 18. Los locales empezaban a abonar el terreno para asegurar su tiquete a la final.

Sin ‘stamina’

Los ánimos se fueron calentando con varias broncas que terminaron con amonestados por cada lado. El Poderoso pecaba de exageración en los contactos y perder tiempo, mientras que el Pijao iba al choque y provocaba de palabra. Las interrupciones recurrentes le fueron quitando ritmo al partido y alejaron las opciones de gol en el resto del primer tiempo.

La segunda parte comenzó con la misma dinámica y, a fin de cuentas, Tolima era el de la urgencia de soluciones para darle vuelta al marcador. No obstante, Ismael Rescalvo no ordenó cambios de inmediato. Jersson González tuvo una ocasión clarísima en el mano a mano, pero su disparo fue pésimo y casi termina afuera de los predios del estadio.

Gancho al hígado y recto al mentón

Solamente fue al 68′ cuando el director técnico visitante se animó a mover a su equipo. Gonzalo Lencina era el ingreso lógico y entró para remplazar a Gustavo Ramírez. El cambio dio sus frutos casi de inmediato. Francisco Chaverra rechazó mal la pelota y terminó impactado a Jaime Alvarado, lo cual dejó la pelota servida para que el argentino sacara el derechazo imparable y empatara el asunto al minuto 70.

Además de la preocupación del resultado igualado para el Medellín, lo más angustiante es que el equipo se quedó sin reacción de ahí en adelante. El milagro se obró en el tercer minuto de adición. Juan David Arizala fue el que recogió la pelota, entró al área, acomodó el cuerpo e impactó de zurda hacia un rincón para el 2-1 definitivo. ¡El Poderoso está en la final!

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