Pasará a la historia, aunque no por el juego: las claves del empate entre Llaneros y América de Cali

Por primera vez en el fútbol colombiano, se aplicó la regla que castiga a los porteros que sostienen la pelota en las manos mucho tiempo.

• Datos y estadísticas del partido
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Arrancó un nuevo campeonato. El partido entre Llaneros y América de Cali fue la inauguración oficial de la Liga BetPlay Dimayor 2025-II, la cual coronará a fin de año al campeón número 100 de la primera división de Colombia en su historia. El cuadro de Villavicencio llegaba con la esperanza de abonar camino para la clasificación a cuadrangulares, mientras que los Diablos Rojos estrenaban el proyecto de Diego Raimondi.

Líos y aburrimiento

Hubo lío, pues como la producción de televisión y del VAR es la misma en Colombia, un cierre vial estuvo a punto de hacer suspender el encuentro. Acompañado por una visible mayoría Escarlata, el cuadro vallecaucano tuvo dificultades para acomodarse en el terreno de juego y hacer valer la superioridad de su plantilla ante un equipo que tiene como principal propósito del año la permanencia.

Llaneros jugaba con un bloque medio y eso le era suficiente para contener las intenciones ofensivas de la visita. El más destacado, como tantas otras veces en los Diablo Rojos, fue Rafael Carrascal. Un remate suyo de media distancia fue lo que generó más inquietud durante la primera mitad, que careció de grandes emociones.

Anecdótico

En el minuto 38, se dio un hecho anecdótico para la posteridad: se aplicó por primera vez en Colombia la norma que sanciona con tiro de esquina en contra al portero que sostenga la pelota por más de ocho segundos en sus manos. Fue el guardameta local, Miguel Ortega, el castigado, justo después de atrapar un tiro libre que venía frenado por el golpe en la barrera. El árbitro Steven Camargo aplicó bien el reglamento.

Más allá de un cobro de pelota quieta de Bryan Urueña que atravesó toda el área y por poco se le cuela a Jorge Soto, no hubo mucho para destacar. El descanso llegó como una oportunidad para que los directores técnicos ajustaran sus planes y ofrecieran algo mejor en la segunda mitad.

Ortega, figura

Vinieron varios cambios para el complemento y la mejoría se notó en algo, sobre todo, en América. Cristian Barrios llegó desde el banquillo para remplazar a Jhon Murillo y generó la de mayor peligro, entrando al área y rematando con un derechazo. Ortega estaba bien atento para exponer sus reflejos y salvó a los locales. El guardameta siguió luciéndose al atajar un cabezazo muy complicado de Kéner González.

En el tiempo de adición, Marcos Mina estrelló un testarazo en un palo. No hubo manera de abrir el marcador y se decretó un empate sin goles que tiene mejor sabor para Llaneros. De cualquier manera, Raimondi necesitará algo de paciencia para ir puliendo su idea de juego e implantar la semilla requerida en el funcionamiento de los jugadores en conjunto caleño.

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