Guatemala y un objetivo difícil: por qué Panamá será un rival especial

Publicado

El equipo de Luis Fernando Tena sueña con más y quiere dar el golpe en la segunda jornada de la Copa Oro 2025.

Guatemala venció a Jamaica en el inicio de la Copa Oro 2025 | Reuters
Guatemala venció a Jamaica en el inicio de la Copa Oro 2025 | Reuters

La Selección de Guatemala se juega más que tres puntos este viernes en la Copa Oro 2025. Cuando enfrente a Panamá en el Q2 Stadium de Austin por la segunda jornada del Grupo C, la Bicolor no solo buscará dar un paso firme hacia los cuartos de final, sino también romper con una de sus rachas más frustrantes de los últimos años: lleva casi dos décadas sin ganarle a los canaleros.

Guatemala viene de un triunfo histórico ante Jamaica por 1-0, una victoria que cortó cinco derrotas consecutivas en la Copa Oro y que devolvió la ilusión al pueblo chapín. Pero el desafío que tiene por delante es de alto calibre. Panamá también llega con tres puntos tras golear 5-2 a Guadalupe y es, sin duda, uno de los equipos más sólidos del torneo. Aunque ambos comparten la cima del grupo, el duelo de este viernes será el primero en la historia de la Copa Oro entre ambos, lo que le suma un condimento especial a esta rivalidad centroamericana que nació en 1946 y que tendrá su capítulo número 42.

Los números son claros: Panamá ha ganado 17 de los 41 enfrentamientos históricos, por 15 victorias guatemaltecas y 9 empates. Sin embargo, el dominio canalero ha sido abrumador en los últimos años. Desde 2005 hasta hoy, se enfrentaron en 14 ocasiones. Los panameños ganaron 9 veces, empataron 4 y solo perdieron una. Esa última victoria guatemalteca fue el 17 de agosto de 2005, un ajustado 2-1 en el estadio Mateo Flores, por las eliminatorias rumbo al Mundial de Alemania 2006. Desde entonces, pasaron 19 años sin poder imponerse ante Panamá.

En la era de Luis Fernando Tena, Guatemala ha mostrado señales de crecimiento y orden. Bajo su dirección técnica, la Bicolor se ha enfrentado tres veces a Panamá: dos empates y una derrota. No ha perdido con contundencia, pero tampoco ha podido romper el dominio. Ahora, con una base consolidada y un grupo que respira confianza, el desafío es claro: cambiar la historia reciente y demostrar que Guatemala está para competir con los grandes de la región.

El duelo en Austin se perfila como uno de los más atractivos de la fase de grupos, no solo por lo que hay en juego en la tabla, sino por lo que representa emocionalmente. Para Guatemala, Panamá es un obstáculo recurrente, un muro que parece inquebrantable. Pero también es una oportunidad. Cortar la racha, avanzar en el torneo y dar un golpe de autoridad.

Te puede interesar –