Jordania y Uzbekistán rompen la barrera: así se forjó su primer pase al Mundial tras años de frustraciones

Publicado

Las selecciones asiáticas se beneficiaron de la expansión del torneo y aseguraron su debut mundialista en Estados Unidos, México y Canadá 2026

Uzbekistán y Jordania aseguraron un lugar en el torneo | AFP | NurPhoto via AFP

Faltan 300 días para la Copa del Mundo 2026, y ya conocemos a algunos de los invitados que estarán en el torneo en Estados Unidos, México y Canadá. El nuevo formato del torneo, con su expansión a 48 equipos, abrió nuevas avenidas para países que históricamente han batallado por alcanzar la máxima cita del fútbol internacional. Equipos como Jordania y Uzbekistán han seguido un camino extraordinario para llegar a su primer Mundial y ya preparan su debut para el próximo verano.

La clasificación a la justa veraniega representa un logro sin precedentes para ambas naciones. Una hazaña que redefine su trayectoria futbolística, y se presenta como una conclusión perfecta para una larga historia de resiliencia e intentos que se quedaron a un paso del objetivo. Para está nueva edición la Confederación Asiática (AFC) duplicó sus plazas, que permitió a selecciones como estás cumplir el sueño mundialista, junto a sus potencias habituales. 

El camino de Jordania a su primera Copa del Mundo

Jordania venció a Omán para ganar el boleto | Ameen Ahmed/NurPhoto via AFP

La selección de Jordania se ganó su sobrenombre de Al Nashama (Los Valientes), tras culminar un esfuerzo de dos décadas y asegurar un lugar entre las 48 selecciones del torneo. En esta edición, dominaron su grupo en la segunda ronda clasificatoria para meterse entre los 18 equipos que pelearon por los boletos. Ahí, terminaron solo un punto por encima de Iraq, sellando su pase con un triunfo por 3-0 sobre Omán, gracias a un hat trick de su gran figura Ali Olwan. 

La clasificación de 2026 es particularmente dulce para Jordania dada su historia de frustraciones en las eliminatorias mundialistas. Su primera participación en una fase preliminar al Mundial fue para México 1986. Irónicamente, fue Iraq quien truncó el sueño jordano en aquella ocasión, lo que añade una capa de significado a su clasificación actual.

Pero su intento más doloroso ocurrió en las eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014. Tras una impresionante campaña, Jordania llegó al repechaje intercontinental, donde se enfrentó a Uruguay. El partido de ida en Amán terminó con una contundente derrota por 0-5, haciendo que el empate 0-0 en el partido de vuelta en Montevideo fuera insuficiente. Este encuentro ante los charrúas le dio a Los Valientes una probadita de lo que es disputar una Copa del Mundo, y unas ganas inquebrantables de superar esa barrera.

Uzbekistán: Los Lobos Blancos conquistan el continente

Uzbekistán se había quedado varias veces en el camino | Fadel Senna/AFP

Uzbekistán es reconocida históricamente por ser la selección que más cerca se ha quedado de disputar su primer Mundial. La clasificación de los Lobos Blancos ha culminado un largo y doloroso viaje de fracasos, que inició en 1991 con su independencia de la Unión Soviética. El equipo dirigido por Srecko Katanec le compitió a potencias como Irán y Qatar durante el proceso clasificatorio, y amarraron su pase con solo una derrota en los diez partidos disputados. Su generación dorada, encabezada por nombres como Abbobsbek Fayzullaev y Abdukodir Khusanov del Manchester City refleja un proyecto paciente y buen construido con este objetivo en mente. 

La clasificación de Uzbekistán es una revancha histórica, tras una serie de eliminaciones particularmente dolorosas. Uno de los episodios más controvertidos de la historia ocurrió en 2005, cuando se enfrentaron a Bahréin en una eliminatoria a dos partidos por un boleto al repechaje intercontinental ante Trinidad y Tobago. Con los Lobos Blancos arriba por 1-0 en el marcador, el árbitro sancionó un penal a su favor. Sin embargo, el silbante anuló el acierto por una invasión de área, otorgando un tiro libre indirecto al rival en lugar de repetir el penal.

Uzbekistán solicitó formalmente que el partido se registrara como una victoria automática por 3-0. La FIFA, en cambio, ordenó repetir el partido, que terminó 1-1, y el encuentro de vuelta 0-0. Bahréin ganó por la regla del gol de visitante y avanzaron al playoff ante la isla caribeña, donde cayeron con marcador global de 2-1. 

Para el mundial de 2014, volvieron a estar a un paso de la clasificación, y volvieron a quedarse cortos. En la primera fase de grupos dominaron su sector con seis puntos de ventaja sobre un gigante como Japón. Todo apuntaba a que sería el fin de la maldición, pero todo fue sentenciado por un autogol. Los Lobos Blancos acabaron la última etapa del clasificatorio en la tercera posición de su sector, por detrás de Irán y empatados en puntos con Corea del Sur, pero con un gol menos en la diferencia. Ese gol, un tanto en propia puerta de Akmal Shorakhmedov en su visita a Seúl, que le dio a los locales el triunfo por la mínima. 

La derrota ante Corea, que avanzó de forma directa con el segundo puesto, fue otro duro golpe para el fútbol uzbeko. El tercer lugar les otorgó un pase a la quinta ronda, para disputar un lugar en el Playoff intercontinental. Aquí se juntan nuestras historias. Uzbekistán y Jordania se vieron las caras en una serie de ida y vuelta, donde ambos partidos acabaron empatados a uno. La eliminatoria llegó hasta los penales, donde Los Valientes ganaron por 9-8 para quedarse con el pase para enfrentar a Uruguay. 

El éxito de los Lobos Blancos no es un golpe de suerte, sino el resultado de una “revolución futbolística” y una planificación estratégica a largo plazo. Desde 2018, el gobierno uzbeko ha realizado serias inversiones en el desarrollo del deporte, estableciendo academias de fútbol juvenil. Estos esfuerzos han cosechado éxitos significativos en las categorías juveniles, ganando la Copa Asiática Sub-23 de la AFC en 2018, la Copa Asiática Sub-20 en 2020 y 2023, y el título Sub-17 a principios de 2025. Además, el equipo nacional olímpico de fútbol se clasificó para los Juegos de Paris 2024.

Impacto social

Más allá de los logros dentro del terreno de juego, la clasificación de Jordania y Uzbekistán para el Mundial 2026 ha desatado una ola de emoción y orgullo nacional, revelando el profundo impacto social que el fútbol puede tener en la vida de las personas y en la identidad de una nación. En Amán, los aficionados salieron a las calles en sus coches, haciendo sonar las bocinas y coreando cánticos de victoria, mientras otros ondeaban la bandera nacional en señal de triunfo. Un espectacular espectáculo de luces con drones iluminó el cielo nocturno con mensajes como “¡Se acerca, héroes!”.

La clasificación de Uzbekistán desató celebraciones en todo el país, con calles llenas de desfiles, música y canciones patrióticas. El Presidente uzbeko Shavkat Mirziyoyev calificó la clasificación como un “regalo festivo para nuestra gente” y un “logro histórico que inspirará a las futuras generaciones”.  Tras el partido final contra Qatar, el mandatario  entregó personalmente medallas, trofeos e incluso las llaves de coches nuevos a los jugadores y al cuerpo técnico en una gran ceremonia de premiación en el campo.

Históricamente, un puñado de naciones asiáticas dominaban las clasificaciones. Con más cupos, equipos fuera de la élite regional tienen una mayor probabilidad de irrumpir en el torneo. Esto podría generar una mayor competitividad a nivel continental. Al ver el éxito de equipos como Jordania y Uzbekistán, otros países podrían emular sus modelos de desarrollo y elevar el nivel competitivo de la confederación en el futuro cercano. 

Aún quedan 35 boletos disponibles para el torneo en Norteamérica y con el formato expandido, aún más selecciones podrán unirse a está lista de debutantes, y cumplir al fin, su sueño mundialista. 

TE PUEDE INTERESAR