Belinda Bencic: La nueva cara del renacer maternal en un Grand Slam

La tenista suiza avanzó a cuartos de Wimbledon 2025 y se convirtió en una de las escasas mujeres en volver a brillar en un grande tras ser madre

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Belinda Bencic hizo historia al clasificar por primera vez en su carrera a los cuartos de final de Wimbledon. Lo hizo este lunes 7 de julio, tan solo catorce meses después de convertirse en madre de una niña, desafiando las expectativas físicas y emocionales que conlleva regresar a la alta competencia tras la maternidad. Esta actuación la coloca en una lista selecta de tenistas que han logrado brillar en el más alto nivel del tenis luego de dar a luz.

La suiza, de 28 años de edad, bajó en el ranking de la WTA durante su año de ausencia por embarazo, llegando a colocarse en el puesto 913 en noviembre de 2024; sin embargo, su retorno fue meteórico: ganó el WTA 500 de Abu Dabi en febrero de 2025, apenas diez meses después del nacimiento de su hija Bella. En marzo, alcanzó los cuartos de final en Indian Wells, eliminando a Coco Gauff, una de las favoritas del circuito, y este lunes avanzó a cuartos de Wimbledon, donde se citará con Mirra Andréyeva el miércoles.

A continuación repasamos otros casos, donde tenistas lograron brillar en Grand Slam después de convertirse en madres.

Serena Williams: Un legado de poder y maternidad

En 2017, Serena Williams ganó el Abierto de Australia mientras estaba embarazada de ocho semanas, en uno de los capítulos más sorprendentes de la historia del tenis. Luego se alejó del circuito por un año para dar a luz a su hija Olympia. Lejos de retirarse, volvió con fuerza y alcanzó nada menos que cuatro finales de Grand Slam como madre: dos en Wimbledon (2018 y 2019) y dos en el US Open (2018 y 2019).

Su regreso no solo fue impresionante en lo competitivo, sino también en lo simbólico. Serena se convirtió en estandarte de la lucha por la equidad de género y la conciliación entre la vida familiar y profesional. A través de entrevistas, redes sociales y conferencias, alzó la voz por una maternidad más comprendida en el deporte. Su legado va mucho más allá de los 23 títulos de Grand Slam: redefinió lo que significa ser una madre atleta en la élite mundial.

Kim Clijsters: La pionera del regreso triunfal

La belga, Kim Clijsters, fue una de las primeras grandes figuras del tenis moderno en demostrar que se puede volver a competir —y ganar— al máximo nivel después de la maternidad. Se retiró por primera vez en 2007, tuvo a su hija Jada en 2008 y regresó al circuito en 2009. Ese mismo año, ganó el US Open, y repitió la hazaña en 2010, además de conquistar el Abierto de Australia en 2011.

“La gente me pregunta mucho qué se necesita para ganar un Grand Slam como madre en la gira. Creo que ahora que soy mayor, cuando pienso en eso y en cómo gané tres majors después de tener a mi hija Jada, todo se reduce a afrontar las cosas como vienen”, dijo Clijsters en marzo pasado, durante una entrevista con Legends’ Voice.

Victoria Azarenka: Persistencia bielorrusa desde la maternidad

Victoria Azarenka fue número uno del mundo y campeona del Abierto de Australia en 2012 y 2013, pero su carrera tomó un giro personal cuando fue madre en 2016. El regreso no fue fácil: tuvo que enfrentar una prolongada batalla legal por la custodia de su hijo Leo, lo que le impidió salir de California durante casi un año. A pesar de ello, en 2020 regresó con fuerza y alcanzó la final del US Open, cayendo ante Naomi Osaka en un partido memorable.

Ese año también formó parte del trío histórico de madres (junto a Serena Williams y Tsvetana Pironkova) que llegaron a los cuartos de final en el mismo Grand Slam. Azarenka ha sido una de las voces más consistentes en reclamar igualdad de condiciones y mayor comprensión para las madres en el circuito, abogando por cambios estructurales que hoy empiezan a tomar forma.

Tsvetana Pironkova: El regreso sorpresa que conmovió a Nueva York

La búlgara, Tsvetana Pironkova, estuvo alejada del circuito durante tres años tras dar a luz, y pocos esperaban verla de nuevo en la élite. Sin embargo, en el US Open 2020 sorprendió al mundo al llegar a los cuartos de final jugando con ranking protegido y sin haber disputado torneos de preparación. Lo hizo con un tenis elegante y cerebral, venciendo a jugadoras del top 30 en el camino.

Naomi Osaka: Un retorno esperado

La japonesa Naomi Osaka, campeona de cuatro Grand Slams, se convirtió en madre en 2023. Luego de una pausa que también incluyó un periodo de reflexión mental y emocional, regresó al circuito en 2024 con la mira puesta en el Abierto de Australia. Aunque su vuelta ha sido progresiva y aún no ha alcanzado rondas finales en majors, el mundo del tenis sigue atento a su evolución.

Estas historias no solo son conquistas deportivas, sino manifestaciones claras de una evolución necesaria en el deporte profesional. La maternidad ya no representa un punto final en la carrera de una atleta. Al contrario: puede ser el inicio de una segunda etapa. Belinda Bencic es la más reciente prueba de ello. Pero ciertamente, no será la última.

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