US Open 2025: Aryna Sabalenka, frente a las expectativas y sus propios fantasmas

Publicado

La número uno del mundo defiende la corona en Nueva York con la presión de conquistar su primer Grand Slam del año

En vísperas del US Open 2025, todas las miradas están puestas en Aryna Sabalenka, campeona defensora del torneo y número uno del ranking WTA. La temporada de la bielorrusa ha sido inusual: es, de manera demostrable, la jugadora más dominante del circuito, pero su búsqueda de un título de Grand Slam este año ha estado marcada por repetidos tropiezos en los momentos decisivos. 

Flushing Meadows representa su última oportunidad de 2025 de coronarse en uno de los Majors, una campaña en la que no solo buscará retener la corona, sino demostrar que puede manejar la presión. Será una verdadera prueba para confirmar si puede transformar su poder inigualable y su consistencia en un nuevo título grande, validando así su reinado en la cima.

Dominio en pistas duras

Sabalenka ha tenido un año dominante y, aunque no ha logrado coronarse en los Grand Slams, sí ha consolidado su hegemonía sobre la pista dura, superficie en la que ha ganado tres de los últimos cinco grandes. En 2025 conquistó los títulos de Brisbane y Miami, además de llegar a las finales del Abierto de Australia e Indian Wells. Su fortaleza sobre cemento ha sido particularmente clara: acumula un registro de 26 victorias y solo cinco derrotas en la temporada. 

Esta consistencia la ha convertido en la jugadora más exitosa en términos de balance de triunfos y caídas. Con 50 triunfos y apenas 10 derrotas, presenta uno de los mejores registros del circuito, ha conservado el número uno todo el año y va en camino de terminar la temporada en esa posición. Sus constantes apariciones en instancias finales parecen garantizadas; el problema es lo que sucede cuando llega a ellas. Su incapacidad de cerrar con un título de Grand Slam ha creado un reinado paradójico

Poder devastador y vulnerabilidades expuestas

Sabalenka no pudo defender el título en Australia | Reuters

El patrón de su temporada es claro: alcanza las rondas decisivas en los grandes torneos, pero se queda corta. En el Abierto de Australia fue finalista, derrotada por Madison Keys. En Roland Garros llegó nuevamente a la lucha por el campeonato, donde perdió ante Coco Gauff. Y en Wimbledon repitió una profunda carrera, pero volvió a quedarse a medio camino en semifinales frente a Amanda Anisimova.

El estilo de juego de Sabalenka es uno de los más definidos del circuito, pero también puede volverse en su contra. Su principal fortaleza es la capacidad de dictar los puntos con lo que muchos consideran el mejor servicio del tenis femenil. Su esquema se basa en un primer saque poderoso y un control absoluto desde la línea de fondo. Cuando entra en ritmo, sus golpes potentes  son demoledores, planos, capaces de cerrar los rallies en pocos tiros y vencer a sus rivales con un estilo agresivo, de todo o nada. Esa potencia ofensiva es un arma que pone a cualquiera en desventaja desde la primera pelota.

Sin embargo, la misma naturaleza de su juego puede volverse frágil bajo presión. Una de sus debilidades históricas ha sido la inconsistencia en el segundo servicio, que en ocasiones deriva en un alto número de dobles faltas. Un ejemplo reciente fue su derrota en los cuartos de final del WTA1000 de Cincinnati ante Elena Rybakina. Pese a llevar ventaja en el cara a cara, cayó en un partido sorprendentemente unilateral: 6-1, 6-4 en apenas 75 minutos. Ganó solo el 65% de los puntos con su primer saque, frente al 81% de la kazaja, que además sumó 11 aces por apenas cuatro de la número uno.

Su potencia también le juega en contra cuando enfrenta a grandes defensoras, capaces de alargar los puntos hasta forzar sus fallos. El juego de fuerza que emplea exige precisión quirúrgica, y en los momentos de máxima intensidad, su mecánica se descompone, lo que deriva en una cascada de errores no forzados. La final perdida en Roland Garros ante Gauff fue un ejemplo claro con 70 errores no forzados.

El peso de la historia

La número 1 del mundo fue subcampeona en Roland Garros | Reuters

El talento está fuera de duda, el dominio también, sobre todo en su superficie favorita de cara a un torneo que ya sabe cómo ganar. Los números confirman que se mantiene en la élite hasta los momentos críticos. Su historial revela una victoria y tres derrotas en sets decisivos de finales de Grand Slam. Muchas de estas derrotas fueron por márgenes estrechos, lo que muestra que siempre compite al máximo nivel, pero falla al cerrar cuando la exigencia es mayor. 

El US Open plantea a Sabalenka un desafío único. Como campeona defensora, enfrenta una carga inmensa de expectativas y la historia juega en su contra. Desde el título de Serena Williams en 2014, ninguna mujer ha logrado defender con éxito la corona en Nueva York, una racha que calificó de “insana” e “impredecible”. No obstante, ha expresado su confianza en que la experiencia le permitirá manejar esa situación y cambiar esa estadística.

La vigente campeona llega a Flushing Meadows como clara favorita. Su juego físico es prácticamente imparable cuando está en control. La consistencia que ha mostrado a lo largo del año confirma que su nivel sigue siendo de élite. Aun así, sus problemas recurrentes en sets decisivos y los colapsos bajo máxima tensión permanecen como una amenaza real.

Camino complicado

Aryna Sabalenka se impone a Jessica Pegula y se queda con el título del US Open 2024
Sabalenka ganó el último US Open | Reuters

El sorteo no le facilita las cosas. Para la tercera ronda podría enfrentar a Leylah Fernández, finalista en Flushing Meadows en 2021 y verdugo de Sabalenka en semifinales aquel año, en una de las mayores sorpresas de la historia del torneo. Más adelante podría cruzarse con la danesa Clara Tauson, revelación en el WTA 1000 de Montreal tras derrotar a Iga Swiatek, campeona de Wimbledon y Cincinnati.

De superar esa barrera, los cuartos de final presentarían rivales de enorme exigencia: Rybakina, que la venció en Cincinnati; Emma Raducanu, con quien ya ha tenido partidos muy ajustados en esta temporada; o Jasmine Paolini, jugadora con cualidades defensivas similares a Gauff y finalista en Cincinnati.

En semifinales podría encontrarse con Mirra Andreeva, que ya la derrotó en Indian Wells, en otra de sus finales perdidas de la campaña. La joven rusa es capaz de generar ángulos y enfrentar el fuego de la bielorrusa con más fuego. En una hipotética final, el cruce sería contra nombres como Swiatek, en gran momento y pisándole los talones en la carrera por el número uno, Gauff, quien le ha ganado dos de los últimos tres enfrentamientos, incluida la final de París, o Jessica Pegula, con sed de revancha tras la derrota en la final del año pasado.

La gran incógnita

La temporada ha dejado a Sabalenka como la jugadora más dominante y, al mismo tiempo, más decepcionante en los escenarios decisivos. El US Open le ofrece la última oportunidad del año para romper esa dinámica. Parece estar obligada a sostener las altas expectativas que ha creado con su juego, y la presión se intensifica en la Gran Manzana después de esas tres derrotas dolorosas.. ¿Logrará convertir la defensa del título en un bicampeonato histórico, o se marchará de 2025 sin un solo Grand Slam?

TE PUEDE INTERESAR