¡A un año del Mundial! Los 365 jugadores que definieron la historia de las Copas del Mundo
Rumbo a Estados Unidos, México y Canadá 2026: la cuenta regresiva para honrar a los 365 gigantes de la historia del fútbol

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La Copa del Mundo es más que un torneo; es un evento que cada cuatro años detiene al planeta, une a millones de personas y escribe las páginas más gloriosas de la historia del fútbol. En sus estadios nacen leyendas, se forjan héroes y se viven momentos inolvidables que se transmiten de generación en generación. A exactamente 365 días de que el balón vuelva a rodar en Estados Unidos, México y Canadá 2026, comienza una cuenta regresiva única para celebrar a los verdaderos protagonistas de esa magia: los jugadores.
Este homenaje está dedicado a los 365 futbolistas que, por su talento, carácter o un instante de genialidad, se han convertido en figuras influyentes en la historia de los Mundiales. A lo largo de este recorrido, se viajará década por década, desde los pioneros de 1930 hasta las estrellas del torneo más reciente, destacando a las figuras más emblemáticas y recordando a quienes forman parte de este selecto club.
1930s: Los primeros reyes del fútbol
La historia de los Mundiales comenzó en la década de los 1930, con un formato muy diferente al que conocemos ahora. Durante este periodo, el fútbol se consolidó como un fenómeno global, en tres ediciones diferentes: Uruguay 1930, Italia 1934 y Francia 1938. Los primeros torneos estuvieron marcados por largos trayectos en barco, un juego físico y tácticas en desarrollo. Esta década vio nacer a los primeros campeones, a grandes goleadores y mitos del balompié.
Las primeras dos copas fueron levantadas por los países anfitriones: Uruguay e Italia, algo que no vemos desde 1998. El primer capítulo de la historia se escribió en Montevideo, donde el cuadro charrúa recibió a 12 países de todo el continente y levantó su primer título. La gran figura de aquel equipo fue su capitán, José Nasazzi, un pilar con carácter inquebrantable que impuso condiciones durante todo el torneo. En ataque, Pedro Cea se convirtió en el gran héroe uruguayo con tres goles en la semifinal ante Yugoslavia y el tanto que igualó la final ante Argentina por 2-2 e inició la remontada. Del lado albiceleste, el mundo descubrió a Guillermo Stábile, que terminó el torneo como máximo anotador, con ocho dianas en solo cinco partidos.
El resto de la década se pintó de azzurri. La Italia de Vittorio Pozzo sumó dos estrellas a su camiseta, liderada en el campo por un talento histórico y una leyenda ‘milanesa’ como Giuseppe Meazza. El gran goleador fue clave para que el país de la bota se convirtiera en el primer bicampeón en la historia de los Mundiales, con grandes torneos en 1934 y 1938. Durante está etapa, aunque no levantó la copa, Leónidas da Silva se convirtió en el primero de muchos brasileños en dominar los mundiales. El atacante deslumbró al Viejo Continente con sus habilidades y acrobacias y se coronó como campeón de goleo en Francia con siete goles.
- Álvaro Gestido (Uruguay)
- Andre Abegglen (Suiza)
- Attilio Ferraris (Italia)
- Bert Patenaude (Estados Unidos)
- Carlos Peucelle (Argentina)
- Ernest Wilimowski (Polonia)
- Enrique Ballestero (Uruguay)
- Enrique Guaita (Italia)
- Eraldo Monzeglio (Italia)
- Franz Wagner (Austria)
- Gino Colaussi (Italia)
- Giovanni Ferrari (Italia)
- Giuseppe Meazza (Italia)
- Guillermo Stábile (Argentina)
- Gustav Wetterström (Suecia)
- György Sárosi (Hungría)
- Gyula Zsengellér (Hungría)
- Harry Andersson (Suecia)
- Héctor Socorro (Cuba)
- Ivan Bek (Yugoslavia)
- Jacinto Quincoces (España)
- José Leandro Andrade (Uruguay)
- José Nasazzi (Uruguay)
- Leonardo Cilaurren (España)
- Leónidas da Silva (Brasil)
- Luis Monti (Argentina / Italia)
- Manuel Rosas (México)
- Matthias Sindelar (Austria)
- Milutin Ivković (Yugoslavia)
- Pedro Cea (Uruguay)
- Peregrino Anselmo (Uruguay)
- Preguinho (Brasil)
- Raimundo Orsi (Italia)
- Ricardo Zamora (España)
- Silvio Piola (Italia)
- Víctor Rodríguez Andrade (Uruguay)
1950s: El Maracanazo y la década de los milagros

Tras doce años de ausencia por la Segunda Guerra Mundial, la Copa del Mundo regresó en la década de 1950, donde se jugaron tres torneos y se crearon algunas de las historias más épicas del deporte: Brasil 1950, Suiza 1954 y Suecia 1958. Desde el ‘Maracanazo’ y los Magiares Mágicos hasta el campeonato de una nación emergente y el nacimiento de O Rei Pelé, los años 50 nos regalaron mundiales inolvidables.
El Mundial de 1950 se resume en un partido, que se mantiene como una de las más grandes sorpresas en la historia del fútbol. Brasil, anfitriona y amplia favorita, necesitaba un empate para levantar su primera copa, pero se topó con la indomable selección uruguaya, autora del famoso ‘Maracanazo’. El alma de aquel equipo era su capitán, Obdulio Varela, que con su carácter y solidez lideró la gran hazaña ante 200,000 espectadores. En el ataque, Juan Alberto Schiaffino y Alcides Ghiggia completaron la gesta. Con su velocidad y coraje, silenciaron al estadio más grande del mundo, con dos goles que se clavaron en la eternidad.
Cuatro años después, Suiza presenció el nacimiento de dos grandes selecciones, la Hungría de Oro y la eventual campeona, Alemania Occidental. Con Ferenc Puskás a la cabeza y once goles de Sándor Kocsis, Hungría se metió hasta la final del torneo. Ahí, se adelantaron por dos goles en tan solo ocho minutos, gracias al futbolista del Real Madrid y el histórico Zoltán Czibor. Sin embargo, los teutones, comandados por su capitán Fritz Walter y un doblete de Helmut Rahn, consiguieron la remontada bajo la lluvia y completaron el Milagro de Berna.
Suecia 1958 vio el nacimiento de la más grande figura de los Mundiales, Pelé, que levantó su primer campeonato y el primero para la verdeamarela. Sin embargo, también destacó un jugador francés, que rompió todos los récords individuales. Just Fontaine protagonizó la mejor actuación goleadora en la historia del torneo. El galo marcó 13 goles en solo seis partidos para imponer una marca que hasta el día de hoy se mantiene vigente.
- Ademir (Brasil)
- Alcides Ghiggia (Uruguay)
- Antonio ‘Tota’ Carbajal (México)
- Antonio Puchades (España)
- Bauer (Brasil)
- Billy Wright (Inglaterra)
- Bobby Evans (Escocia)
- Chico (Brasil)
- Didi (Brasil)
- Djalma Santos (Brasil)
- Eddie Turnbull (Escocia)
- Ernst Ocwirk (Austria)
- Eusebio Tejera (Uruguay)
- Ferenc Puskás (Hungría)
- Fritz Walter (Alemania Occidental)
- Gyula Grosics (Hungría)
- Hans Schäfer (Alemania Occidental)
- Helmut Rahn (Alemania Occidental)
- Hilderaldo Bellini (Brasil)
- José Santamaría (Uruguay / España)
- José Torres (Portugal)
- József Bozsik (Hungría)
- Juan Schiaffino (Uruguay)
- Julinho (Brasil)
- Just Fontaine (Francia)
- Juvenal (Brasil)
- Lennart Skoglund (Suecia)
- Mário Zagallo (Brasil)
- Matías González (Uruguay)
- Mihály Tóth (Hungría)
- Nándor Hidegkuti (Hungría)
- Nílton Santos (Brasil)
- Obdulio Varela (Uruguay)
- Oldřich Nejedlý (Checoslovaquia)
- Orvar Bergmark (Suecia)
- Óscar Míguez (Uruguay)
- Rajko Mitić (Yugoslavia)
- Raymond Kopa (Francia)
- Roque Máspoli (Uruguay)
- Sándor Kocsis (Hungría)
- Stanley Matthews (Inglaterra)
- Telmo Zarra (España)
- Tom Finney (Inglaterra)
- Vasilije Šijaković (Yugoslavia)
- Vladimir Beara (Yugoslavia)
- William Martínez (Uruguay)
- Yuri Voinov (Unión Soviética)
- Zito (Brasil)
- Zizinho (Brasil)
- Zoltán Czibor (Hungría)
1960s: Héroes inolvidables en Chile e Inglaterra
La década de los 60s presentó dos Mundiales que se destacaron por su intensidad y el surgimiento de figuras legendarias. Chile 1962 se rindió ante la magia brasileña y cuatro años después, los creadores del juego, Inglaterra, alcanzaron la cima del balompié por primera y última ocasión en el mítico Wembley Stadium.
En tierras andinas, Pelé sufrió un duro golpe que lo dejó fuera por el resto del torneo. Ante la duda sobre si Brasil podría defender su corona sin su rey, la respuesta llegó en forma de otro genio del balompié: Garrincha. El atacante se colgó el equipo a la espalda, y dominó el torneo para asegurar el bicampeonato con cuatro tantos. A su lado, Vavá fue el killer perfecto, con goles cruciales. Luego de brillar en el 58 con cinco dianas, el atacante marcó en su segunda final consecutiva para superar a la Checoslovaquia de Josef Masopust.
El Mundial de 1966 tuvo como protagonista a los anfitriones, la selección Inglaterra. El motor, cerebro y espíritu de aquel equipo fue el legendario Bobby Charlton, que sobrevivió a la tragedia de Munich y canalizó su talento en el terreno de juego. Sus dos goles en la semifinal ante Portugal fueron determinantes para asegurar el único campeonato en la historia de los tres leones en casa propia. Inglaterra levantó el trofeo, pero también inmortalizó a otras dos figuras. Eusebio, el delantero lusitano que se consolidó como máximo goleador con nueve tantos y llevó a Portugal hasta el tercer puesto en su primera aparición mundialista. En la portería, otra leyenda, Lev Yashin que con grandes atajadas le dio a la Unión Soviética su mejor resultado hasta el momento, el cuarto lugar.
- Amarildo (Brasil)
- Bobby Charlton (Inglaterra)
- Bobby Moore (Inglaterra)
- Cesare Maldini (Italia)
- Dražan Jerković (Yugoslavia)
- Eladio Rojas (Chile)
- Enrique Borja (México)
- Eusébio (Portugal)
- Ferenc Bene (Hungría)
- Florian Albert (Hungría)
- Garrincha (Brasil)
- Geoff Hurst (Inglaterra)
- George Cohen (Inglaterra)
- Gordon Banks (Inglaterra)
- Helmut Haller (Alemania Occidental)
- Horst Szymaniak (Alemania Occidental)
- Igor Chislenko (Unión Soviética)
- Josef Masopust (Checoslovaquia)
- Lajos Tichy (Hungría)
- Leonel Sánchez (Chile)
- Lev Yashin (Unión Soviética)
- Mário Coluna (Portugal)
- Milan Galić (Yugoslavia)
- Silvio Marzolini (Argentina)
- Uwe Seeler (Alemania Occidental)
- Valentin Ivanov (Unión Soviética)
- Valeriy Porkuyan (Unión Soviética)
- Valery Voronin (Unión Soviética)
- Vavá (Brasil)
- Viktor Ponedelnik (Unión Soviética)
- Viliam Schrojf (Checoslovaquia)
1970s: La coronación del rey y la revolución naranja

El Mundial de México 70 marcó un antes y un después en la historia del fútbol. La primera década transmitida a todo el mundo a color nos regaló tres torneos vibrantes con momentos imborrables. Inició con la coronación del rey Pelé en el Estadio Azteca, la revolución del fútbol total neerlandés en Alemania 1974 y la pasión albiceleste para alcanzar la gloria en casa.
El certamen en territorio azteca fue la sinfonía final de la carrera internacional de Pelé. O Rei fue el director de orquesta del Scratch du Oro que levantó su tercer título en 12 años. Para muchos, aquella Brasil se mantiene como el equipo de la historia, con el liderazgo de Pelé, grandes goles y una perfecta asociación con figuras como Jairzinho y Rivelino, el futbolista de Santos quedó inmortalizado como el monarca indiscutible del balompié.
Cuatro años más tarde, Rinus Michels sorprendió al mundo con una revolución absoluta. La Naranja Mecánica, bajo la batuta de Johan Cruyff, presentó el fútbol total, que los llevó a su primera final del torneo. Con su visión, elegancia y capacidad para estar en todas partes del campo lo convirtieron en el rostro de una nueva era. Sin embargo, no pudieron hacerse del trofeo. Alemania Occidental aprovechó la localía para regresar a la cima del deporte, con su propia revolución. Franz Beckenbauer, jugando en la posición de líbero, demostró solidez y una mezcla perfecta de defensa y ataque para ganar un duelo táctico para la historia. La otra gran figura de aquella selección fue Gerd Müller, que venía de ser el máximo artillero de 1970, y anotó el gol del triunfo en la final de Múnich.
Cuatro años después, Países Bajos volvería a una final del Mundial, en Argentina 78, pero se toparon con una intensa y pasional albiceleste, liderada por un goleador letal: Mario Kempes. El Matador marcó seis goles, incluyendo un doblete en la final que se fue a tiempo extra, para darle a los argentinos la ansiada Copa del Mundo en el Monumental.
- Alberto Tarantini (Argentina)
- Anatoliy Bishovets (Unión Soviética)
- Andrzej Szarmach (Polonia)
- Atilio Ancheta (Uruguay)
- Berti Vogts (Alemania Occidental)
- Branko Oblak (Yugoslavia)
- Carlos Alberto Torres (Brasil)
- Daniel Bertoni (Argentina)
- Daniel Passarella (Argentina)
- Dieter Müller (Alemania Occidental)
- Dirceu (Brasil)
- Dušan Bajević (Yugoslavia)
- Elías Figueroa (Chile)
- Franz Beckenbauer (Alemania Occidental)
- Gerd Müller (Alemania Occidental)
- Gérson (Brasil)
- Giacinto Facchetti (Italia)
- Gianni Rivera (Italia)
- Grzegorz Lato (Polonia)
- Hans Krankl (Austria)
- Jairzinho (Brasil)
- Johan Cruyff (Países Bajos)
- Johan Neeskens (Países Bajos)
- Johnny Rep (Países Bajos)
- Karl-Heinz Schnellinger (Alemania Occidental)
- Kazimierz Deyna (Polonia)
- Leopoldo Luque (Argentina)
- Luigi Riva (Italia)
- Mario Kempes (Argentina)
- Paul Breitner (Alemania Occidental)
- Pelé (Brasil)
- Reinhard “Stan” Libuda (Alemania Occidental)
- René Houseman (Argentina)
- Rivelino (Brasil)
- Rob Rensenbrink (Países Bajos)
- Robert Gadocha (Polonia)
- Roberto Bettega (Italia)
- Roberto Boninsegna (Italia)
- Roberto Dinamite (Brasil)
- Ruud Krol (Países Bajos)
- Sepp Maier (Alemania Occidental)
- Teófilo Cubillas (Perú)
- Tostão (Brasil)
- Ubaldo Fillol (Argentina)
- Wolfgang Overath (Alemania Occidental)
1980s: La década de Maradona

La década de los 80 llevó las actuaciones individuales a un nuevo nivel. En España 1982 y México 1986 brillaron equipos como el Brasil de Tele Santana y la Francia del “Carré Magique”. Sin embargo, los momentos más destacados fueron el resurgimiento de una Italia pragmática con una plantilla legendaria y el dominio absoluto de Diego Armando Maradona en territorio azteca.
El Mundial de 1986 tiene un solo nombre: Maradona. Lo que hizo en México trasciende cualquier estadística y se mantiene como la actuación individual más icónica de la historia. El Diego se echó a un país en la espalda y lo llevó a la gloria eterna: Capitán, creador, goleador y líder, Maradona participó directamente en 10 de los 14 goles de la albiceleste y nos regaló uno de los partidos más memorables de todos los tiempos. Su actuación contra Inglaterra en cuartos de final es un resumen perfecto de su figura: la picardía de “La Mano de Dios” y la genialidad pura del “Gol del Siglo”, una obra de arte que lo consagró como una deidad del fútbol.
Cuatro años antes, la figura tuvo un camino de menos a más. Paolo Rossi aterrizó en España cuestionado y tuvo un inicio lento a su campaña, donde Italia fue segunda de grupo con un empate ante Camerún. Sin embargo, se levantó cuando más importaba. Su saltó a la gloria comenzó con un hat trick para eliminar a la Brasil de Zico en la segunda fase de grupos. Zico, el cerebro de aquella verdeamarela, deleitó al mundo con su gran técnica y visión, pero sucumbieron ante la eficacia de Rossi, que continuó con dos goles en semifinales ante Polonia, y el tanto que abrió el marcador ante Alemania Occidental en la final del Bernabéu.
Los 80s también fueron los años de los grandes centrocampistas, ninguno más elegante que Michel Platini, líder del cuadrado mágico francés que disputó dos semifinales gracias a su clase, inteligencia y calidad. En México, surgió un tipo distinto de estrella: Gary Lineker, que se llevó la Bota de Oro como máximo goleador con 6 tantos, que permitió a Inglaterra soñar con su segundo campeonato, antes de cruzarse con Maradona.
- Alain Giresse (Francia)
- Careca (Brasil)
- Claudio Gentile (Italia)
- Diego Maradona (Argentina)
- Dino Zoff (Italia)
- Emilio Butragueño (España)
- Enzo Scifo (Bélgica)
- Falcão (Brasil)
- Fulvio Collovati (Italia)
- Gary Lineker (Inglaterra)
- Harald ‘Toni’ Schumacher (Alemania Occidental)
- Jean-Marie Pfaff (Bélgica)
- Jean Tigana (Francia)
- Jorge Valdano (Argentina)
- Jorge Burruchaga (Argentina)
- José Luis Brown (Argentina)
- Josimar (Brasil)
- Júnior (Brasil)
- Karl-Heinz Rummenigge (Alemania Occidental)
- Luizinho (Brasil)
- Manuel Amoros (Francia)
- Manuel Negrete (México)
- Mágico González (El Salvador)
- Marco Tardelli (Italia)
- Michel Platini (Francia)
- Norman Whiteside (Irlanda del Norte)
- Paolo Rossi (Italia)
- Peter Shilton (Inglaterra)
- Preben Elkjær (Dinamarca)
- Sócrates (Brasil)
- Zbigniew Boniek (Polonia)
- Zico (Brasil)
1990s: El poder teutón, el renacer de Brasil y la consagración francesa
El Mundial de Italia 90 fue dominado por la imponente figura de Lothar Matthäus. El capitán y motor de Alemania Occidental fue el jugador completo: defensa, organización y una potencia descomunal para llegar al área. Marcó cuatro goles y su liderazgo impulsó a la Mannschaft a su tercer título mundial. Cuatro años después, el juego se transformó por completo. Luego de un torneo táctico y defensivo, Estados Unidos premió el ataque y la creatividad.
La final en el Rose Bowl enfrentó a dos genios absolutos de la pelota. Por un lado, Romário, un futbolista explosivo que cumplió su promesa de terminar la sequía de 24 años de Brasil. El carioca marcó cinco goles y fue el alma del equipo ganador de su cuarta estrella. Del otro lado del campo, el héroe trágico: Roberto Baggio, que cargó a una Italia emocionante hasta la final, con goles en octavos, cuartos y semifinales. Su talento llegó a todas las esquinas de Estados Unidos y su penal fallado en la final se convirtió en una de las imágenes más dolorosas en la historia de los Mundiales.
La década también fue escenario para héroes inesperados y el nacimiento de nuevas leyendas. En 1994, Hristo Stoichkov, con su carácter explosivo y una zurda mágica, lideró a una sorprendente Bulgaria hasta las semifinales, ganando la Bota de Oro y poniendo a su país en el mapa del fútbol mundial. Y en 1998, el mundo vio la coronación de un nuevo rey: Zinedine Zidane. Tras un inicio de torneo complicado, “Zizou” regresó para orquestar el juego de Francia con una elegancia y una visión sobrenaturales. Su actuación en la final contra Brasil, donde anotó dos goles de cabeza, es legendaria. Fue la noche en que le entregó a Francia su primera Copa del Mundo y se sentó en el trono de los más grandes.
- Andreas Brehme (Alemania)
- Bebeto (Brasil)
- Brian Laudrup (Dinamarca)
- Cafu (Brasil)
- Carlos Gamarra (Paraguay)
- Christian Vieri (Italia)
- Claudio Caniggia (Argentina)
- Claudio Taffarel (Brasil)
- Cuauhtémoc Blanco (México)
- Davor Šuker (Croacia)
- Dennis Bergkamp (Países Bajos)
- Didier Deschamps (Francia)
- Dragan Stojković (Yugoslavia)
- Dunga (Brasil)
- Edgar Davids (Países Bajos)
- Fabien Barthez (Francia)
- Fernando Hierro (España)
- Franco Baresi (Italia)
- Frank de Boer (Países Bajos)
- Gabriel Batistuta (Argentina)
- Gheorghe Hagi (Rumania)
- Hristo Stoichkov (Bulgaria)
- Iván Zamorano (Chile)
- Jay-Jay Okocha (Nigeria)
- Jorginho (Brasil)
- Jürgen Klinsmann (Alemania)
- Kennet Andersson (Suecia)
- Krasimir Balakov (Bulgaria)
- Laurent Blanc (Francia)
- Lilian Thuram (Francia)
- Lothar Matthäus (Alemania)
- Marcel Desailly (Francia)
- Marcelo “Matador” Salas (Chile)
- Márcio Santos (Brasil)
- Michel Preud’homme (Bélgica)
- Oleg Salenko (Rusia)
- Paolo Maldini (Italia)
- Patrick Vieira (Francia)
- Paul Gascoigne (Inglaterra)
- Roberto Baggio (Italia)
- Roger Milla (Camerún)
- Romário (Brasil)
- Rudi Völler (Alemania)
- Salvatore Schillaci (Italia)
- Sergio Goycochea (Argentina)
- Thierry Henry (Francia)
- Tomáš Skuhravý (Checoslovaquia)
- Walter Zenga (Italia)
- Zinedine Zidane (Francia)
2000s: La redención del Fenómeno y la Italia de Lippi
La primera década del siglo XXI trajo consigo dos Mundiales con personalidades muy distintas. Corea-Japón 2002, el primero en suelo asiático, fue un torneo de sorpresas, con potencias como Francia y Argentina eliminadas en las primeras rondas y con selecciones como Turquía y Corea del Sur llegando a semifinales. La década se cerró en Alemania 2006, un evento que celebró la historia del fútbol y vio el triunfo de la disciplina táctica y la fuerza colectiva, en un torneo que despidió a una generación de leyendas y coronó a un campeón memorable.
El Mundial de 2002 fue la historia de redención de Ronaldo Nazario. Tras el drama de la final de 1998 y dos años de lesiones que casi terminan con su carrera, El Fenómeno regresó de forma espectacular. Se convirtió en el máximo goleador en la historia de los Mundiales. Fue la figura indiscutible de Brasil. Su actuación culminó con dos goles en la final contra la muralla alemana, un final de película que le dio el pentacampeonato a su país La hazaña de Ronaldo no habría sido posible sin su principal socio de ataque: Rivaldo. Con su gran técnica y zurda potentísima, marcó cinco goles cruciales.
A pesar del dominio de ambos atacantes, el mejor jugador del torneo estuvo del lado perdedor en aquella final. Oliver Kahn fue una muralla humana llevando a Alemania hasta la final con atajadas imposibles y un liderazgo feroz. Su dominio fue tal, que se convirtió en el primer y único guardameta en ganar el Balón de Oro del Mundial, un premio que inmortalizó su legendaria actuación.
Si el 2002 fue de los delanteros, el Mundial de 2006 fue la oda a la defensa y al colectivo, encarnados en la Italia campeona. El equipo fue liderado desde la zaga por su capitán, Fabio Cannavaro, quien completó un torneo perfecto, anticipando cada jugada y comandando con una autoridad que le valió el Balón de Oro de ese año, un hito para un defensor. Detrás de él, Gianluigi Buffon fue un gigante en la portería, permitiendo solo dos goles en todo el torneo. El tempo y la magia los ponía Andrea Pirlo, que dictaba el ritmo del equipo desde el mediocampo. A ellos se sumaron la creatividad de Francesco Totti y los momentos decisivos de veteranos como Alessandro Del Piero, cuyo gol en la semifinal contra Alemania selló el pase a la final que ganaron en penales.
- Alessandro Del Piero (Italia)
- Alpay Özalan (Turquía)
- Andrea Pirlo (Italia)
- Andriy Shevchenko (Ucrania)
- Brian McBride (Estados Unidos)
- Claude Makélélé (Francia)
- Claudio Reyna (Estados Unidos)
- David Trezeguet (Francia)
- Deco (Portugal)
- El Hadji Diouf (Senegal)
- Fabio Cannavaro (Italia)
- Fabio Grosso (Italia)
- Florent Malouda (Francia)
- Francesco Totti (Italia)
- Franck Ribéry (Francia)
- Gennaro Gattuso (Italia)
- Gianluca Zambrotta (Italia)
- Gianluigi Buffon (Italia)
- Hasan Şaş (Turquía)
- Hernán Crespo (Argentina)
- Hidetoshi Nakata (Japón)
- Hong Myung-bo (Corea del Sur)
- Ji-sung Park (Corea del Sur)
- Jon Dahl Tomasson (Dinamarca)
- Junichi Inamoto (Japón)
- Landon Donovan (Estados Unidos)
- Luca Toni (Italia)
- Luís Figo (Portugal)
- Maniche (Portugal)
- Marco Materazzi (Italia)
- Michael Ballack (Alemania)
- Oliver Kahn (Alemania)
- Pascal Zuberbühler (Suiza)
- Rafael Márquez (México)
- Ricardo Carvalho (Portugal)
- Rivaldo (Brasil)
- Roberto Carlos (Brasil)
- Ronaldinho (Brasil)
- Ronaldo (Brasil)
- Rui Costa (Portugal)
- Simão Sabrosa (Portugal)
- Sol Campbell (Inglaterra)
- Steven Gerrard (Inglaterra)
- Tim Cahill (Australia)
- William Gallas (Francia)
- Yoo Sang-chul (Corea del Sur)
2010s: La Furia Roja y el poder alemán

La década de 2010 nos llevó a tres continentes distintos y nos dejó tres campeones memorables. Empezó en Sudáfrica 2010, el primer Mundial en África, donde el sonido de las vuvuzelas acompañó la coronación de la España del “tiki-taka”. Continuó en Brasil 2014, un torneo vibrante y lleno de goles que fue testigo de la humillación de la selección anfitriona y la merecida victoria de Alemania tras las tragedias de la década pasada. Por último, Rusia 2018, un torneo marcado por la consagración de una joven y explosiva selección francesa.
El poderío de la selección alemana en esta década se personificó en su letal pareja de ataque. Por un lado, el legendario Miroslav Klose, un delantero clásico y killer del área, quien en 2014 no solo fue pieza clave para ganar el título, sino que se convirtió en el máximo goleador en la historia de los Mundiales con 16 tantos, un récord que se mantiene hoy en día. A su lado, el brillante Thomas Müller, un atacante total que irrumpió en 2010 para ganar la Bota de Oro y que en 2014 volvió a marcar 5 goles, siendo el motor ofensivo del equipo campeón.
La historia de Sudáfrica 2010 es la historia de la mejor selección española de todos los tiempos. Sus dos figuras más decisivas fueron David Villa, el goleador que con sus 5 tantos abrió el camino en las fases eliminatorias, y Andrés Iniesta, el genio que manejó los hilos del equipo y que se inmortalizó al marcar el gol de la victoria en tiempo extra de la final. Ellos fueron la punta de lanza de una generación dorada que dominó el fútbol mundial, ganando también dos Eurocopas, y que estaba repleta de leyendas como Xavi Hernández, Iker Casillas, Carles Puyol y Sergio Ramos.
Aunque los títulos fueron para equipos europeos, el talento latinoamericano brilló a través de actuaciones individuales históricas. En 2010, Diego Forlán se echó a Uruguay al hombro, lo llevó a unas históricas semifinales y fue galardonado con el Balón de Oro al mejor jugador del torneo. Cuatro años después, en Brasil 2014, el mundo descubrió a James Rodríguez. El colombiano fue la gran revelación, ganando la Bota de Oro con 6 goles, incluyendo una volea magistral contra Uruguay que ganó el Premio Puskás.
Finalmente, Rusia 2018 enfrentó a una de las jóvenes promesas más emocionantes de todos los tiempos y un centrocampista consolidado en la élite del balompié. Por el lado del campeón, un joven Kylian Mbappé explotó en la escena mundial. Con solo 19 años, su velocidad y su talento aniquilaron defensas, y su gol en la final lo puso junto a Pelé como los únicos adolescentes en marcar en el partido por el título. Enfrente, Luka Modrić, el capitán y corazón de Croacia, quien completó un torneo magistral. Fue el motor que guió a su país a una final histórica y le dio su Balón de Oro.
- Alexander Golovin (Rusia)
- Andrés Guardado (México)
- Andrés Iniesta (España)
- Antoine Griezmann (Francia)
- Arjen Robben (Países Bajos)
- Asamoah Gyan (Ghana)
- Bastian Schweinsteiger (Alemania)
- Benjamin Pavard (Francia)
- Bryan Ruiz (Costa Rica)
- Carles Puyol (España)
- Cesc Fàbregas (España)
- Javier “Chicharito” Hernández (México)
- Cristiano Ronaldo (Portugal)
- David Luiz (Brasil)
- David Villa (España)
- Dejan Lovren (Croacia)
- Denis Cheryshev (Rusia)
- Diego Forlán (Uruguay)
- Diego Lugano (Uruguay)
- Eden Hazard (Bélgica)
- Essam El-Hadary (Egipto)
- Felipe Baloy (Panamá)
- Fernando Muslera (Uruguay)
- Frank Lampard (Inglaterra)
- Giovanni van Bronckhorst (Países Bajos)
- Guillermo Ochoa (México)
- Harry Kane (Inglaterra)
- Harry Maguire (Inglaterra)
- Iker Casillas (España)
- Ivan Perišić (Croacia)
- Ivan Rakitić (Croacia)
- James Rodríguez (Colombia)
- Keylor Navas (Costa Rica)
- Kylian Mbappé (Francia)
- Luis Suárez (Uruguay)
- Luka Modrić (Croacia)
- Lukas Podolski (Alemania)
- Manuel Neuer (Alemania)
- Mario Mandžukić (Croacia)
- Mark van Bommel (Países Bajos)
- Mats Hummels (Alemania)
- Mesut Özil (Alemania)
- Miroslav Klose (Alemania)
- Neymar (Brasil)
- N’Golo Kanté (Francia)
- Olivier Giroud (Francia)
- Óscar “Tacuara” Cardozo (Paraguay)
- Paul Pogba (Francia)
- Philipp Lahm (Alemania)
- Raphaël Varane (Francia)
- Robin van Persie (Países Bajos)
- Romelu Lukaku (Bélgica)
- Sami Khedira (Alemania)
- Samuel Eto’o (Camerún)
- Samuel Umtiti (Francia)
- Sergio Busquets (España)
- Sergio Ramos (España)
- Thibaut Courtois (Bélgica)
- Thomas Müller (Alemania)
- Toni Kroos (Alemania)
- Wesley Sneijder (Países Bajos)
- Xabi Alonso (España)
- Xavi Hernández (España)
2020s: La coronación de Messi y la gesta de Marruecos

El Mundial de Qatar 2022 tuvo un protagonista absoluto: Lionel Messi. En una actuación que quedará para la historia, el capitán argentino lideró a su selección a la conquista de su tercera Copa del Mundo, el único gran trofeo que le faltaba. Con 7 goles, dos de ellos en la inolvidable final, y 3 asistencias, Messi no solo fue el jugador más decisivo, sino el alma y el líder de su equipo. Su magia, su liderazgo y su determinación en los momentos clave cimentaron, para muchos, su estatus como el mejor futbolista de todos los tiempos.
La otra gran hazaña de Qatar 2022 fue la de la selección de Marruecos, la gran revelación que hizo historia al convertirse en el primer equipo africano en alcanzar las semifinales de una Copa del Mundo. Apoyados en un espíritu colectivo inquebrantable, los Leones del Atlas brillaron gracias al talento de pilares fundamentales como el portero Bono, el lateral Achraf Hakimi, el motor del mediocampo Sofyan Amrabat y la revelación creativa Azzedine Ounahi.
- Achraf Hakimi (Marruecos)
- Alexis Mac Allister (Argentina)
- Ángel Di María (Argentina)
- Azzedine Ounahi (Marruecos)
- Bono (Marruecos)
- Emiliano Martínez (Argentina)
- Enzo Fernández (Argentina)
- Joško Gvardiol (Croacia)
- Julián Álvarez (Argentina)
- Lionel Messi (Argentina)
- Rodrigo de Paul (Argentina)
- Sofyan Amrabat (Marruecos)
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