Benjamín Gil critica a la afición de Diablos y descarta dirigirlos en el futuro
El manager de los Charros de Jalisco llamó “maleducados” a los seguidores del club capitalino luego de la derrota en el segundo juego de la Serie del Rey
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Los Diablos Rojos del México tomaron ventaja de 2-0 en la Serie del Rey 2025 tras imponerse 12-1 a los Charros de Jalisco en el Estadio Alfredo Harp Helú. El resultado dejó a los capitalinos a dos triunfos del título en la temporada del centenario de la Liga Mexicana de Beisbol, mientras que los tapatíos se marchan a casa obligados a reaccionar para mantener vivas sus aspiraciones.
Sin embargo, la paliza en el diamante no fue lo único que marcó la noche en la Ciudad de México. En conferencia posterior al encuentro, el manager de los Charros, Benjamín Gil, expresó su molestia con un sector de la afición escarlata, a la que acusó de lanzar insultos durante el juego. El estratega fue tajante al asegurar que no tendría interés en trabajar para la organización capitalina debido a lo que calificó como una falta de respeto.
“Lo que pesó fueron los batazos”
Gil aclaró que la derrota de su equipo fue por el desempeño de su rival dentro del diamante, especialmente en la caja de bateo, no por el ambiente en el Harp Helú. “Lo que pesó fueron los batazos que dieron, la afición. ¿Cuánta gente hubo? No sé cuánta gente hubo. 20,000. Un juego de Spring Training en Ligas Mayores. Eso no pesa. Para mí no pesa el estadio, no pesa la afición”, señaló al inicio de su intervención.
No obstante, el dirigente jalisciense remarcó que lo que sí le dejó un mal sabor de boca fueron las actitudes de algunos seguidores locales. El manager dejo claro que este comportamiento lo aleja de un futuro con la entidad de la CDMX. “Me da risa que sea… ah, déjame escoger la palabra correcta para no equivocarme… ah, maleducada. Lo que sí me quedan ganas es de nunca ser manejador o ser parte de Diablos. ¿Por qué? Porque debe de haber respeto. Debería de haber respeto”, afirmó.

“No es el tipo de gente que te gustaría representar”
Gil subrayó que siempre ha tenido disposición para convivir con los aficionados y atender a los medios, pero que la respuesta recibida esta vez fue distinta. “A uno no le falta respeto. Es más, me quedo, tomó fotos hasta la hora que quieran, a donde sea. Y creo que responder con groserías, pues deja un mal sabor de boca, no es el tipo de gente que en algún momento te gustaría representar, verdad”, declaró.
El manager aclaró que no generalizaba ni pretendía señalar a todos los asistentes, aunque sí consideró que una parte del público rompió con la atmósfera habitual del béisbol. “No estoy hablando de todo el mundo. Había mucha gente. A lo mejor se escaparon unos hooligans del fútbol y vinieron al beis, pero sí es desagradable que estén gritando groserías y cosas que no van”, puntualizó.
“El béisbol debe ser un ambiente familiar”
El estratega aprovechó para contrastar lo vivido con la idea de que el beisbol mexicano suele ofrecer un entorno familiar en sus estadios. “Creó la afición del béisbol a diferencia, digamos del fútbol, es que el béisbol, y le aplaudo a todas las directivas, el ambiente que ponen es familiar”, aseguró.
Finalmente, admitió que lo más preocupante fue pensar en los niños presentes en las gradas. “Si hubiera estado yo en las gradas allí con niños chiquitos, me hubiera molestado. Aunque fuera del equipo que fuera, aunque fuera aficionado de Diablos, que estuvieran gritando las cosas que gritan delante de niños. Creo que no es lo adecuado”, concluyó.
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