Justin Fields queda fuera del protocolo de conmoción y jugará ante Dolphins
El quarterback supera el protocolo de conmoción y será titular con el equipo de Nueva York

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Los New York Jets recibieron una de las noticias más alentadoras de su joven temporada: Justin Fields fue dado de alta del protocolo de conmoción cerebral y será el quarterback titular en el partido de Monday Night Football ante los Miami Dolphins. Tras varios días de evaluación médica y entrenamientos progresivos, Fields recibió la autorización final de los especialistas independientes de la NFL, quienes confirmaron que está apto para volver a la acción.
El anuncio representa un respiro para una franquicia que inició el año con tres derrotas consecutivas y que había sufrido por la ausencia de su mariscal principal. La presencia de Fields eleva las expectativas ofensivas del equipo y renueva la confianza en un proyecto que busca consolidarse en una de las divisiones más competitivas de la liga.
El golpe y la entrada al protocolo
La lesión de Justin Fields ocurrió durante la Semana 2, en el enfrentamiento ante los Buffalo Bills, cuando fue derribado de forma violenta por Joey Bosa tras lanzar un pase incompleto. El impacto en la cabeza lo obligó a salir momentáneamente del campo, y aunque intentó continuar, los médicos determinaron que debía ser evaluado bajo el protocolo de conmoción cerebral.
De acuerdo con los lineamientos de la NFL, este protocolo contempla cinco etapas progresivas que van desde el reposo absoluto hasta la reincorporación a actividades con contacto pleno. Cada fase debe ser superada sin síntomas antes de pasar a la siguiente, y el jugador debe contar con la aprobación tanto del cuerpo médico del equipo como de un especialista independiente.
Durante la Semana 3, Fields no fue autorizado para jugar, y su lugar fue ocupado por el veterano Tyrod Taylor, quien completó 197 yardas, dos pases de anotación y una intercepción que fue regresada para touchdown. A pesar de su esfuerzo, los Jets cayeron ante los Buccaneers por 29-27, evidenciando carencias en protección y ritmo ofensivo.
Progresos y regreso a los entrenamientos
Conforme pasaron los días, Fields mostró avances significativos. Primero participó en prácticas de forma limitada, realizando ejercicios sin contacto, y posteriormente fue habilitado para entrenar con el grupo completo. Esta evolución fue monitoreada de cerca por los médicos del equipo, quienes analizaron su respuesta física y cognitiva tras cada sesión.
El entrenador en jefe Aaron Glenn había sido claro desde el inicio: “Si Fields es autorizado médicamente, será el titular”. Esa postura fue ratificada el viernes, cuando el mariscal superó la última evaluación neurológica y recibió la luz verde para jugar. Con ello, los Jets recuperan a su pieza clave justo antes de un duelo divisional que podría marcar el rumbo de su temporada.
En declaraciones previas, el propio Fields reconoció que el proceso fue complicado: “Algunos días te sientes bien, y al siguiente los síntomas vuelven. Hay que tener paciencia y confiar en los médicos”. Su caso refleja la seriedad con la que la NFL ha tratado los traumatismos craneales tras los antecedentes recientes de jugadores como Tua Tagovailoa, precisamente el quarterback de los Dolphins.
Un regreso en horario estelar
El regreso de Fields coincidirá con el escenario más mediático de la semana: el Monday Night Football, en el que los Jets buscarán su primera victoria del año ante unos Dolphins que también llegan con marca de 0-3 y con urgencias similares.
Este contexto convierte el encuentro en un cruce de necesidades. Para Nueva York, representa la oportunidad de romper la racha negativa y validar el proyecto ofensivo construido alrededor de su joven mariscal. Para Miami, el reto es contener a un quarterback móvil que puede castigar tanto por aire como por tierra.
El cuerpo técnico de los Jets ha trabajado en un plan de juego que priorice la protección de su quarterback y reduzca el riesgo de contactos innecesarios. Es probable que se implementen esquemas de pase rápido y jugadas diseñadas para aprovechar su movilidad sin exponerlo a golpes directos. Por otro lado, los Dolphins podrían responder con presión constante y defensas mixtas para forzarlo a lanzar en movimiento. Su principal objetivo será interrumpir el ritmo de Fields desde el inicio, aprovechando cualquier error que pueda cometer tras su regreso de una lesión cerebral.
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