¡Locura en el regreso de Micah Parsons! Packers y Cowboys se olvidan de defender en dramático empate

Emocionante empate 40-40 en Arlington. Partidazo con seis cambios de liderato, ofensivas imparables y defensas ausentes

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El AT&T Stadium vivió una de las noches más surrealistas de la temporada. Green Bay Packers y Dallas Cowboys protagonizaron un empate 40-40 cargado de drama, cambios de liderato y defensas endebles, en el que el regreso de Micah Parsons a Arlington terminó siendo una historia secundaria frente al frenesí ofensivo. La Semana 4 de la NFL dejó un partido que pasará a la memoria por sus vaivenes, errores defensivos y un desenlace caótico en tiempo extra.

Primeros golpes: Packers marcan el ritmo temprano

El encuentro arrancó con todo el ímpetu de los visitantes. Jordan Love condujo una serie inicial de 69 yardas en menos de cinco minutos, encontrando a Romeo Doubs en la zona de anotación. Dallas lucía vulnerable en la secundaria y para colmo, un intento de respuesta se desmoronó cuando una intercepción de Trevon Diggs fue anulada por un error infantil: 12 hombres en el campo.

La debilidad de los Cowboys se acentuó pronto. Love volvió a castigar la secundaria con pases profundos y Doubs selló su segundo touchdown de la noche, ampliando la ventaja. Para empeorar las cosas, el punto extra de Brandon McManus fue bloqueado y devuelto por Markquese Bell para dos puntos, un raro destello defensivo en un duelo dominado por las ofensivas.

Dallas responde con Pickens y Prescott

El público de Arlington despertó con un jugadón de George Pickens, quien atrapó un pase acrobático de Dak Prescott para preparar el primer touchdown de los Cowboys. Minutos después, el propio Prescott se lanzó al suelo para empatar el marcador.

Aun así, Green Bay mantuvo el control con su estilo físico. Josh Jacobs consiguió entrar en las diagonales tras una serie de poder terrestre, aunque sus números eran discretos. La defensa de Dallas apenas podía frenar.

Antes del descanso, James Houston provocó un fumble sobre Jordan Love, y Prescott capitalizó de inmediato conectando con Pickens para el touchdown que dio vuelta al marcador 16-13. Los Cowboys se iban al vestidor con aire en los pulmones, pero con mucho por corregir.

Segunda mitad: un intercambio de golpes sin piedad

El tercer cuarto fue una montaña rusa. Green Bay retomó la ventaja con un ataque balanceado, combinando el escape de 25 yardas de Jordan Love y un corte preciso de Jacobs en la zona roja. Prescott respondió con un pase quirúrgico a Jake Ferguson para devolver el mando a Dallas.

La dinámica quedó clara: ninguna defensa podía sostenerse. Love halló a Romeo Doubs por tercera ocasión en la noche, mientras que Dallas replicó con una ofensiva comandada por Prescott y rematada por Javonte Williams. Era la quinta vez que cambiaba el liderato.

Los últimos minutos del cuarto periodo fueron un espectáculo de locura. Primero, Pickens volvió a aparecer con un touchdown de 28 yardas para el 37-34 a favor de Dallas con solo 43 segundos en el reloj. Pero Jordan Love, frío bajo presión, lideró una serie de 39 yardas en siete jugadas, que culminó con un gol de campo de McManus de 53 yardas para empatar en el último segundo: 37-37. El partido se iba a tiempo extra.

Tiempo extra: Parsons y el drama final

La prórroga comenzó con Dallas en ofensiva. Prescott encontró a Jalen Tolbert en una recepción espectacular para mover cadenas, pero cuando parecía que los Cowboys podían sentenciar, apareció Micah Parsons, quien por fin logró una captura clave. El golpe obligó a conformarse con un gol de campo de Brandon Aubrey (40-37).

Green Bay tuvo entonces la última palabra. Love rozó el milagro con un pase a la zona de anotación en tercera oportunidad, casi agotando el reloj. Y con un solo segundo por jugar, Brandon McManus convirtió desde 34 yardas para sellar el empate 40-40, el segundo tiempo extra de la temporada para Dallas.

Balance de un duelo inolvidable

Más allá del marcador, el encuentro dejó muchas lecturas. Dak Prescott firmó una de sus actuaciones más completas, con 319 yardas y tres touchdowns, además de conexión mágica con George Pickens (134 yardas). Javonte Williams también destacó en el backfield.

Por su parte, Jordan Love estuvo brillante, sumando tres pases de anotación y liderando seis cambios de ventaja, apoyado por un Romeo Doubs intratable. Josh Jacobs, pese a ser contenido en tramos largos, encontró huecos en momentos decisivos.

El gran ausente fue Parsons. En su regreso a Arlington, el linebacker apenas apareció en la hoja de estadísticas hasta la captura en el tiempo extra, afectado por molestias en la espalda. Aun así, su jugada evitó una derrota segura.

El resultado deja a ambos equipos con la sensación de haber ganado y perdido al mismo tiempo. Un empate 40-40 que expone las debilidades defensivas de Packers y Cowboys, pero que también regala uno de los espectáculos más vibrantes de lo que va de temporada. Arlington fue testigo de un partido donde nadie defendió, todos atacaron, y el reloj decidió decretar paz en medio del caos.

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