¡Más problemas para el Barcelona! juez ve dos delitos en el fichaje de Griezmann

El Barcelona pagó 15 millones al Atlético en 2019 para evitar un juicio por contactos irregulares con Griezmann antes de su fichaje

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El fichaje de Antoine Griezmann por el Barcelona en 2019 vuelve a estar bajo la lupa judicial. El Juzgado de Instrucción número 32 de Barcelona, que investiga los pagos y comisiones durante la presidencia de Josep Maria Bartomeu, encontró indicios de dos delitos en una operación vinculada al traspaso del delantero francés. Según un auto judicial revelado por El Mundo, el juez considera que el pago de 15 millones de euros al Atlético de Madrid podría haber tenido como objetivo frenar una denuncia del club rojiblanco, que acusaba al Barça de haber negociado con el jugador cuando aún tenía contrato en vigor.

El documento detalla que, para dar apariencia de legalidad a esa transacción, se simuló la compra de un derecho de tanteo sobre varios futbolistas del Atlético, aunque en realidad ese acuerdo habría servido para evitar sanciones deportivas. Con esta decisión, el juez añade un nuevo frente judicial al Barcelona, ya envuelto en otras investigaciones sobre supuestos manejos irregulares en fichajes y pagos a intermediarios durante la gestión de Bartomeu.

¿Cómo fue el fichaje de Griezmann por el Barcelona?

El fichaje de Antoine Griezmann fue una de las operaciones más polémicas del mercado de 2019. El delantero, entonces figura del Atlético de Madrid, tenía una cláusula de rescisión de 200 millones de euros, que se redujo a 120 millones el 1 de julio de 2019, justo cuando el Barcelona ejecutó su contratación.

Sin embargo, según el juez, las negociaciones entre Griezmann y el Barcelona comenzaron meses antes, cuando esa cláusula aún estaba en su valor más alto. En el auto, al que accedió El Mundo, el magistrado señala que “se negoció con un futbolista con contrato en vigor con otro club”, lo que violaría las normas de la FIFA, que prohíben cualquier contacto directo con un jugador hasta los últimos seis meses de su contrato.

El juez recuerda que las conversaciones entre el entorno del futbolista (incluida su hermana y representante) y la directiva azulgrana, habrían ocurrido entre febrero y marzo de 2019, es decir, en un periodo técnicamente prohibido. De hecho, el Atlético de Madrid llegó a denunciar el caso ante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), argumentando que el Barça había actuado de manera irregular al negociar sin autorización.

La investigación judicial resalta que, tras la denuncia, ambos clubes alcanzaron un acuerdo extrajudicial para evitar mayores consecuencias. Este pacto incluyó un pago de 15 millones de euros por parte del Barcelona y un supuesto derecho preferente sobre varios futbolistas rojiblancos, entre ellos Saúl Ñíguez y José María Giménez. Pero el juez sostiene que ese contrato de tanteo pudo ser solo una tapadera para justificar un pago con otro propósito.

¿Qué delitos habría cometido el Barcelona en el fichaje de Griezmann?

El magistrado que instruye el caso señala en su auto dos posibles delitos: administración desleal y falsedad contable.

El primero de ellos se relaciona con el uso indebido de los recursos del club. Según el juez, el pago de 15 millones al Atlético “podría constituir un perjuicio patrimonial para el FC Barcelona”, ya que no habría respondido a una operación deportiva legítima, sino a la intención de evitar una sanción de la RFEF o la exposición pública de pruebas que comprometían a la directiva de Bartomeu. Es decir, los responsables del club habrían actuado contra los intereses del propio Barcelona para proteger su imagen y evitar un castigo.

El segundo delito señalado es el de falsedad contable. El auto explica que, “para dar aspecto lícito a los pagos, se simuló presuntamente que se adquiría un derecho de tanteo prioritario sobre diferentes jóvenes futbolistas del Atlético de Madrid”. Esa simulación, de acuerdo con el juez, habría tenido como finalidad encubrir la verdadera naturaleza del acuerdo, disfrazando un pago irregular como si se tratara de una transacción deportiva.

El documento agrega que, una vez firmado ese contrato de tanteo, el Atlético presuntamente desistió de aportar las pruebas ante la RFEF sobre la denuncia presentada contra el Barcelona. En palabras del juez, “dichos hechos podrían integrar el delito de administración desleal y/o falsedad contable”.

La causa se suma a otras investigaciones que ya afectan al expresidente Bartomeu y a parte de su junta directiva. La instrucción general busca determinar si existió una red de pagos irregulares a intermediarios y posibles fraudes contables en diversas operaciones de fichajes. En este contexto, el caso Griezmann aparece ahora como una nueva pieza en un rompecabezas de presuntas prácticas ilícitas dentro del club catalán.

¿Qué implicación tiene el Atlético de Madrid?

El Atlético de Madrid no es un actor secundario en esta historia. El juez reconoce en su auto que el club rojiblanco fue quien denunció originalmente ante la RFEF que el Barcelona había negociado con Griezmann mientras seguía bajo contrato, y que disponía de correos electrónicos comprometedores entre el entorno del jugador y la directiva azulgrana.

Según El Mundo, esos correos de marzo de 2019 mostraban que el acuerdo entre Griezmann y el Barcelona ya estaba cerrado meses antes de la reducción de la cláusula de rescisión, lo que, en teoría, supondría un perjuicio económico para el Atlético. El club madrileño alegó entonces que el Barça debía abonar los 200 millones originales, no los 120 que finalmente pagó.

No obstante, la investigación judicial busca determinar si el Atlético actuó con conocimiento del verdadero propósito del pago o si fue simplemente beneficiario de una maniobra irregular diseñada desde la cúpula azulgrana. Hasta el momento, no hay imputaciones directas contra dirigentes colchoneros, aunque el juez deja abierta la posibilidad de que su papel sea analizado más a fondo en la instrucción.

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