Ivo Basay revela cómo Lapuente cambió la historia del Necaxa… ¡con dos botellas de vino!
El chileno recuerda la lección de vida que le dio Manuel Lapuente a todo el plantel de los Rayos, lo que hizo que llegara la época de bonanza del club en los 90’s
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El exfutbolista chileno Ivo Basay compartió una anécdota sobre su paso por el Necaxa bajo la dirección técnica de Manuel Lapuente durante una entrevista con Miguel Gurwitz en el programa Claro Sports por MVS Radio. Basay recordó su primera concentración con el entrenador mexicano y como el grupo intentó ocultar una botella de vino al verlo acercarse, pensando que se molestaría.
Según relató ‘El Divo’, Lapuente sorprendió al sentarse con ellos y pedir dos botellas más para compartir. “Nos dio una clase magistral de lo que es la relación con el jugador. Él daba, pero también pedía compromiso. Nos hizo entender que había confianza, pero también límites”, comentó Basay. Esa noche, aseguró, fue el inicio de una conexión especial entre el técnico y el plantel, que más tarde se reflejaría en los resultados del equipo.
El exdelantero recordó que, bajo la dirección de Lapuente, Necaxa rompió con la etiqueta de “equipo que siempre llegaba a finales pero no ganaba”. El club consiguió títulos de Liga, Copa, Recopa de la Concacaf y Campeón de Campeones, consolidando una etapa dorada. “Ahí nació una familia. Lapuente nos marcó con su forma de enseñar y con su manera de entender el fútbol y la vida”, declaró Basay en su homenaje al técnico fallecido.
El andino también destacó la visión táctica de Manuel Lapuente, a quien definió como un técnico con un olfato especial para anticipar lo que ocurriría dentro del campo. Explicó que, durante los entrenamientos y charlas previas a los partidos, el estratega mexicano señalaba con precisión por dónde el rival intentaría atacar o qué tipo de dificultades enfrentarían, y casi siempre acertaba. “Era increíble. Tenía un sentido adelantado del juego, veía las cosas antes de que pasaran”, comentó el exdelantero chileno.
El exjugador aseguró que ese nivel de lectura no era casualidad, sino resultado de la experiencia, la preparación y una intuición poco común en los entrenadores. “Los grandes jugadores se anticipan uno o dos segundos antes que los demás; él tenía tres”, dijo Basay, resaltando la capacidad analítica de Lapuente, a quien describió como un técnico que entendía el fútbol desde la observación y la inteligencia, más allá de los esquemas tácticos.
Esa misma suspicacia, añadió, fue clave para los éxitos del Necaxa durante los años noventa. Lapuente no solo transmitía disciplina y respeto, sino también una mentalidad de lectura del rival y de adaptación constante. “Muy pocas veces se equivocaba en un diagnóstico, y eso nos daba confianza total”, afirmó Basay. Para el chileno, esas enseñanzas quedaron grabadas como una de las mayores lecciones de su carrera y como parte del legado que convirtió al técnico mexicano en una figura irrepetible del fútbol nacional.
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