Gilberto Mora brilla en el debut de México ante Brasil en el Mundial sub 20 Chile 2025

El jugador de Tijuana destacó en el estreno con asistencia clave, intentos de gol y constante participación ofensiva en 90 minutos

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El debut de México en el Mundial sub 20 de Chile 2025 fue un partido lleno de emociones y talento juvenil, donde la selección mexicana logró un empate 2-2 ante Brasil. Entre las figuras que se llevaron la atención estuvo Gilberto Mora, de apenas 16 años, quien demostró un nivel sorprendente y dejó claro que tiene calidad para influir en el juego desde su primer partido en la Copa del Mundo.

Inicio prometedor y participación inmediata

Desde los primeros minutos, Mora se mostró activo en la ofensiva. Al minuto 9, inició la acción que terminó en el primer gol de México. Por la banda derecha, Mora desbordó y envió un centro preciso a Tahiel Jiménez, quien remató de cabeza para que Alexéi Domínguez marque en el rechace. Esta jugada dejó claro su capacidad de asociarse con sus compañeros y su visión de juego, aspectos fundamentales para un mediocampista ofensivo. Solo tres minutos después, el joven jugador volvió a aparecer con un disparo desde media distancia que obligó al portero brasileño Otávio a una estirada para evitar el gol.

A lo largo de la primera mitad, Mora fue un constante generador de peligro. En el minuto 12 y nuevamente al 19, intentó tiros lejanos, demostrando confianza y creatividad para abrir espacios en la defensa rival. Su habilidad para desbordar por la banda derecha complicó en varias ocasiones a la zaga brasileña y permitió que México mantuviera presión sobre el conjunto sudamericano.

Segundo tiempo y acciones decisivas

Tras el descanso, Mora continuó siendo un motor ofensivo para México. Ingresó al área brasileña al minuto 55, realizó fintas para desorientar a los defensores y disparó al arco; aunque su tiro se fue desviado, la jugada reflejó su capacidad para generar peligro en situaciones de ataque. Su participación en la combinación con Elías Montiel y Amaury Morales fue constante, buscando crear opciones y mantener la iniciativa en el juego.

Uno de los momentos más destacados llegó al minuto 85, cuando Mora ejecutó un centro desde la banda derecha que encontró la cabeza de Diego Ochoa, quien anotó el gol del empate para México. Esta asistencia fue crucial, ya que equilibró el marcador frente a Brasil y evidenció la precisión de Mora para colocar balones peligrosos a sus compañeros.

En los minutos finales, Mora siguió intentando influir en el resultado. Al 90+2, protagonizó otra acción ofensiva, aunque la pelota no le llegó, mostrando su constante participación y deseo de buscar el gol de la victoria. Su presencia en el área y en la generación de juego ofensivo fue innegable durante todo el partido.

Estadísticas que respaldan su actuación

Gilberto Mora jugó los 90 minutos completos, acumulando 62 toques de balón y completando 38 de 42 pases (90% de efectividad). Intentó driblar en cuatro ocasiones, logrando un éxito, y ganó 8 de 9 duelos terrestres. Además, realizó cinco centros, con tres de ellos precisos, y dos pelotazos largos, uno de ellos exitoso. A pesar de no marcar gol, dejó su firma en la asistencia a Diego Ochoa, mostrando que su contribución va más allá de la estadística de goles. Mora también participó activamente en recuperación y presión, con dos intercepciones y siendo un elemento difícil de superar en duelos individuales.

Madurez y proyección

Lo más notable de Mora no fue solo su técnica, sino su madurez y comprensión táctica a tan corta edad. A lo largo del partido, supo cuándo acelerar el juego, cuándo combinar con sus compañeros y cómo generar peligro sin comprometer la organización del equipo. Su capacidad de asociarse con jugadores como Domínguez y Montiel, así como su lectura del juego, lo convierten en una pieza clave para México en este torneo.

El desempeño de Mora ante un rival como Brasil, considerado uno de los mejores jugadores adolescentes del mundo demuestra su potencial para marcar la diferencia en partidos de alta exigencia. Su debut no solo fue positivo en términos individuales, sino que también fue decisivo para que México lograra un empate valioso en su primer partido del Mundial.

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