Deportivo Pereira atrae “profetas del desastre” en su crisis

La gestión de Álvaro López, presidente del club, ha colmado la paciencia de los hinchas.

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El Deportivo Pereira está cerca de firmar su adiós en el sueño de los cuadrangulares. No es el mejor momento desde ningún punto de vista para el elenco ‘Matecaña’, a pesar de mantener cierto invicto en el Hernán Ramírez Villegas y estar metido en los cuartos de final de Copa. Si todo falla desde arriba, es difícil en el campo de juego lograr los objetivos pactados en un principio.

Para nadie es un secreto que el club sufre un caos interno por los impagos hacia jugadores. Los propios futbolistas ventilaron la alarmante noticia semanas atrás en diálogo con la prensa local, y el cuerpo técnico liderado por Rafael Dudamel no es ajeno a las dificultades. Eso sí, nada les ha impedido presentarse a la cancha con la necesidad de victoria.

Nada ha salido como se esperaba. El sólido arranque, como local, se fue diluyendo con la sequía de resultados. En efecto, los aurirrojos no saben lo que es triunfar desde hace más de un mes, en los octavos de final de Copa a través del estrecho 4-3 ante Real Cundinamarca por la ida. Por concepto de Liga, ya son seis partidos sin ganar, que han relegado al onceno pereirano algo lejos de la zona de privilegio.

Dudamel está en el ojo del huracán. Pero el principal señalado ha sido Álvaro López, quien se ha visto implicado en estas nuevas inestabilidades en la cúpula dirigencial. El presidente no le ha puesto el pecho a la gravísima situación económica que afronta el equipo, ni se ha defendido en medio de los juicios emitidos públicamente por los jugadores.

En Pereira esperan que López dé la cara. Por lo pronto, en cancha tampoco resultan las cosas. El sábado anterior, cuando se jugaba una de las cartas para ponerse a tiro, defraudó con una igualdad rocambolesca frente a Unión Magdalena.

Los “profetas del desastre” en Pereira

En medio de la sequía, preocupa el nivel futbolístico de algunos jugadores. Muchos ya dan como eliminado al ‘Matecaña’, pero Rafael Dudamel dejó saber que todavía ve el “vaso medio lleno”. De hecho criticó a un periodista, Camilo Arango, quien lo juzgaba a través de la conferencia de prensa por el flojo andar del equipo.

El venezolano le contestó como “profeta del desastre” ante la postura de que el equipo cedió terreno pensando en la clasificación. Parece que el comunicador no es el único que le refuta: la hinchada, que en principio elogió la llegada de Dudamel, ya bajó hace rato su credibilidad al trabajo del estratega. Pasó de elogios a los murmullos al medir el aplausómetro.

Quedan siete fechas. 21 puntos en disputa. Pereira necesitará al menos lograr cinco victorias para ilusionarse de nuevo con un tiquete a cuadrangulares. Misión casi que utópica pensando en los rivales que se avecinan, sin olvidar los problemas que aún se mantienen por cuenta de las deudas hacia los protagonistas del juego.

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