Néiser Villarreal, entre dos destinos: se vuelve Ronaldo Nazario o Marlos Moreno

El delantero ha quedado marcado para depender de su talento, pues la cuestión del profesionalismo y la disciplina le quedó grande.

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“The only time success comes before work is in the dictionary” traduce “El único momento en el que el éxito viene antes que el trabajo es en el diccionario”. Esa es una frase atribuida al entrenador de fútbol americano Vincent Lombardi, célebre por dejar interesantes reflexiones entre el deporte y la vida. Qué gran momento este para desempolvar sus palabras y traerlas a colación en un tema de interés en Colombia.

Lo que ocurre con Néiser Villarreal es bien sencillo de ver, pero el resentimiento de un sector de la prensa contra Millonarios ha llevado a muchos a hacer una injustificada defensa hacia las actitudes incorrectas del jugador. Incluso, algunos han llegado al extremo de culpar a funcionarios del club Embajador por, supuestamente, haber pasado por alto actos de indisciplina en el pasado. Que quede bien claro que eso es totalmente falso y, efectivamente, decirlo resulta en algo absurdo y ridículo. De nuevo: los enemigos cerca.

Sea la oportunidad para también dejarle un consejo a César Torres, director técnico de la Selección Colombia sub 20. Profesor, con todo respeto, sus palabras de este miércoles en el programa Equipo F de ESPN son un total desatino. Se entiende que usted quiera apoyar a uno de los dirigidos de su proceso, pero decir que el club no le informó al futbolista la fecha en la que tenía que retornar y que por eso tenía el derecho de perderse deja su imagen muy mal parada, como para no salir entre ingenuo o alcahuete. La misma prueba se la da lo que sucedió con Carlos Sarabia.

El delantero, eso sí, es una de las grandes joyas que están surgiendo dentro de las nuevas generaciones del fútbol en el continente. Haber sido goleador del Campeonato Sudamericano y sus anotaciones en el Mundial Sub 20 le han creado toda una fama como para alimentar el vacío contenido de aquellos a los que les encanta vender humo con tal de ganarse una interacción en redes sociales y también para algunas ofertas serias que llegaron, como la que finalmente va a concretarse con Cruzeiro de Brasil.

Sin embargo, a hoy, lo único que se puede decir con certeza es que es un grandioso futbolista juvenil, porque de profesional no tiene nada. Y antes de entrar al asunto de su comportamiento, valga la pena contar que el aporte del tumaqueño para el equipo profesional de Millonarios se resume a dos asistencias. La función de anotar goles con la primera plantilla lo superó por completo… cómo no, si es que anda pensando, como se dice en Colombia, en “puras pendejadas” y se creyó bien fácil el cuento que le vendieron.

Ahora sí, pasando al tema de sus actitudes, son cosas que no resisten excusa. La reciente desaparición que protagonizó no fue más que la reiteración de lo que ya había hecho después del Sudamericano. Su actuación en ese certamen dio pie para que quienes lo asesoran le pintaran un cuadro en donde era el nuevo megacrack del fútbol internacional y que lo propicio era empezar a hacerle la vida a ‘cuadritos’ a su club con tal de presionar una salida anticipada a la vigencia de su contrato, que expira el próximo mes de noviembre. De más está la renuencia a conversar alguna posibilidad de renovación o aparecer con camisetas de otros clubes, pues la idea ya era era se marchara libre para cobrar la prima de fichaje y dejar a Millonarios sin un centavo. Business are business and cowards are cowards.

De admirar es el comportamiento que ha tenido la institución albiazul en este asunto tan incómodo. Evitando caer en la provocación de un despido, que es lo que está rogando el jugador y su representación, se ha mantenido firme en su concepto de disciplina y sigue esperándolo. Como lo indicó, lo primero será ejecutar el respectivo proceso administrativo para hacer el intento de enseñarle algo de modales y honra con el trabajo. Adecuado, nunca mejor dicho, haberlo borrado de la plantilla profesional que estaba en el sitio web. No se lo merece y lo único que hace es empañar al resto del grupo.

¿Y entonces que va a suceder? En este punto, solamente se ven dos caminos a la vista. En el primero, este jugador se va a convertir en el gran jugador de talla élite que muchos están esperando y sabrá manejarse entre su eterna inmadurez y los actos de indisciplina gracias al inagotable talento. Haciendo un paralelo, algo similar a lo de Ronaldo Nazario, espectacular futbolista brasileño que regaló años dorados para el balompié, a pesar de que no era muy reconocido por sus maneras de trabajar.

Para hablar de la otra vía, es necesario aclarar algo antes. Se menciona el nombre de Marlos Moreno únicamente por la gran promesa que era y que no logró explotar, pero no por actos de indisciplina, pues de este lado no constan y, muy por el contrario, que Atlético Nacional le haya abierto la puerta de nuevo para que intente resurgir es algo que habla muy bien de él. Lo compró el City Group e ilusionó por varios años con verlo jugando en el Manchester City. Sin embargo, eso no se dio y la mayor parte de su carrera se fue en un trampolín de cesiones en equipos de menor talla. El inicio de su carrera dejó inolvidables partidos espectaculares, como el de aquella asistencia para un gol de último minuto de la Selección Colombia absoluta contra Bolivia en la Paz y que valió tres puntos en la Eliminatoria.

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