¡Paren todo! David Benavidez anuncia pelea con ‘Zurdo’ Ramírez en mayo
Benavidez noqueó a Yarde y anunció salto a crucero: peleará con el campeón Zurdo Ramírez el 2 de mayo de 2026 en sede por confirmar

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David Benavidez sacudió el panorama del boxeo con una noche completa en Riad. Tras detener a Anthony Yarde, el ‘Mexican Monster’ tomó el micrófono y dejó una frase que cambia su carrera: “Tengo noticias para todos: el 2 de mayo, me enfrentaré al Zurdo Ramírez. Subo a peso crucero”. Con eso, confirmó rival, fecha y salto de división para un combate que ya apunta al fin de semana tradicional de Cinco de Mayo de 2026.
🚨 FIGHT ANNOUNCEMENT! 🚨
— DAZN Boxing (@DAZNBoxing) November 23, 2025
David Benavidez just announced he's moving up to cruiserweight to fight Gilberto "Zurdo" Ramirez! 🇲🇽#RINGIV | @RingMagazine▪️ pic.twitter.com/N9qCaQUcFt
La victoria ante Yarde fue el cierre perfecto de su etapa en semipesado. Benavidez dominó desde el primer asalto con presión alta, ataque al cuerpo y combinaciones largas que marcaron ritmo. Yarde intentó responder con potencia aislada, pero no encontró ajustes para frenar el volumen del mexicano. La pelea terminó en el séptimo round por nocaut técnico, con Benavidez dueño del centro del ring y de los intercambios.
Ese resultado tiene lectura doble. Por un lado, Benavidez retuvo sus títulos en 175 libras y mostró que su paso por semipesado no fue de tránsito tímido. Por otro, dejó claro que el cuerpo ya pedía un nuevo techo. Desde hace meses su equipo hablaba de subir a crucero ante la falta de una ruta clara en semipesado y por la ausencia de un acuerdo con Canelo. El triunfo solo adelantó la decisión.
Un rival de jerarquía
El siguiente paso será frente a Gilberto “Zurdo” Ramírez, campeón unificado AMB y OMB del peso crucero. El mazatleco se reinventó en 200 libras tras su época en supermediano y semipesado. Ganó títulos, los unificó y sostuvo su lugar con defensas exigentes. Hoy es la referencia mexicana de la división, con tamaño natural, volumen de golpeo y experiencia de campeonato.
La fecha del 2 de mayo es una señal de grandeza. Ese fin de semana suele reservarse para el evento más visible del boxeo con público mexicano en Estados Unidos. Que Benavidez llegue ahí con una pelea México vs México entre campeones en plenitud convierte el pleito en un imán comercial y deportivo. Además, llena un vacío en el calendario de la fecha, ahora sin un estelar fijo.
En lo táctico, el choque promete contraste real. Benavidez llega con presión constante, combinaciones en ráfaga y un estilo que busca quebrar al rival por desgaste. Ramírez ofrece guardia zurda, alcance mayor y control de distancia con jab y ritmo sostenido. La clave será quién impone condiciones: si Benavidez logra entrar a media distancia con volumen, o si el Zurdo lo obliga a pelear desde fuera y a navegar su tamaño.
Para Benavidez, el reto principal es trasladar su pegada a una categoría distinta. En crucero los rivales absorben más y castigan con fuerza natural del peso. Tendrá que sostener velocidad y fondo sin perder impacto. Si supera esa prueba, puede sumar un tercer campeonato divisional y colocarse como figura central en pesos altos.
Para el Zurdo, esta defensa es la más mediática de su reinado. Enfrenta a un invicto con empuje global, base mexicana enorme y hambre de legado. Una victoria lo consolidaría como el campeón mexicano dominante del crucero y le daría control simbólico de la fecha de Cinco de Mayo, y también reforzaría su legado en dos divisiones.


