Paulinho se retira lesionado y se pierde el tiempo extra de la Final de la Liga MX
El delantero empató la final al 52’, pudo ser expulsado al 69’ y salió lesionado al 90’. Toluca forzó tiempos extra sin su goleador clave
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La final de la Liga MX Apertura 2025 volvió a girar alrededor de Paulinho, ahora con un matiz distinto y todavía más dramático. En el Estadio Nemesio Diez, Toluca ganó 2-1 el partido de vuelta, empató 2-2 el marcador global y llevó la serie a tiempos extra, pero lo hizo con su delantero estrella fuera de la cancha y envuelto en una noche tan decisiva como polémica.
El partido había arrancado cuesta arriba para los Diablos. Tigres golpeó primero y durante varios minutos sostuvo el control emocional del duelo, mientras el Nemesio Diez empujaba desde la tribuna sin encontrar claridad. La final se jugaba con tensión, pausas largas y mucha fricción, como suele ocurrir cuando el margen de error es mínimo.
Fue entonces cuando apareció Paulinho al minuto 52. El portugués marcó el gol del empate en la eliminatoria, el tanto que igualó el global 2-2 y que devolvió a Toluca a la pelea por el título. El estadio explotó, Mohamed festejó y el delantero confirmó por qué es uno de los nombres más determinantes del torneo.
Ese gol cambió por completo el escenario. Toluca ganó metros, Tigres retrocedió y el partido entró en una fase más abierta, con llegadas constantes y duelos individuales al límite. Paulinho se convirtió en el eje del ataque, fijando centrales y generando espacios para las llegadas de segunda línea.
¿Roja perdonada?
Sin embargo, la noche del héroe estuvo a punto de transformarse en pesadilla. Al minuto 69, Paulinho dio una patada sobre Joaquim en una acción que pudo haber sido sancionada con tarjeta roja. El árbitro optó por no expulsarlo, pero la jugada encendió reclamos, revisiones y tensión en ambos banquillos.
A partir de ese momento, Paulinho jugó condicionado, tanto en lo físico como en lo disciplinario. Toluca siguió empujando, pero el desgaste comenzó a notarse, especialmente tras la salida por lesión de Helinho y con Alexis Vega lejos de su mejor versión.
Tiempo extra sin el goleador
El golpe final llegó en el cierre del tiempo regular. Al minuto 90, Paulinho se retiró lesionado, incapaz de continuar, dejando a Toluca sin su goleador, sin Helinho y con Alexis apenas al 50% para afrontar la prórroga. Diego Barbosa ingresó en su lugar, pero el impacto anímico fue evidente.
El equipo de Antonio Mohamed vivió una situación crítica: disputar un tiempo extra de la final sin el hombre que marcó el gol del empate, sin uno de sus extremos titulares y con su referente ofensivo tocado. El plan de juego se desmoronó en cuestión de minutos, justo cuando la serie exigía máxima precisión.
Con el reglamento claro, sin criterio de posición en la tabla y con definición por penales si persiste el empate, la final entró en un terreno donde cada decisión pesa el doble. Y en ese contexto, la figura de Paulinho quedó marcada por el contraste: héroe al 52’, al borde de la expulsión al 69’ y ausente al 90’, en una noche que puede definir toda una temporada.
