Guardiola ignora especulaciones y se enfoca en su presente en el Manchester City
El español minimiza rumores sobre su salida del club, afirma que no le afectan, prioriza el presente y recuerda que el club debe estar preparado
- Manchester City cumple ante el Brentford y se mete a semifinales de la Carabao Cup
- ¡Sorpresa navideña! Haaland se viste de Santa Claus y reparte regalos en Manchester
- Jornada 17 Premier League 2025, en vivo: horarios y dónde ver los partidos del fútbol de Inglaterra
El futuro de Pep Guardiola en el Manchester City volvió a instalarse en la agenda mediática, no por una crisis deportiva ni por una mala racha, sino por el ruido constante que rodea a los proyectos largos en la élite. En medio de versiones que apuntan a Enzo Maresca como posible sustituto, el técnico catalán decidió responder con firmeza y sin rodeos.
Lejos de alimentar la especulación, Guardiola optó por marcar distancia, insistir en su enfoque diario y contextualizar por qué este tipo de rumores forman parte natural del fútbol moderno, especialmente cuando se dirige a uno de los clubes más dominantes de la última década.

El control del discurso y el enfoque inmediato
Guardiola abrió su postura dejando claro que los rumores no alteran su rutina ni sus decisiones. “No me afectan (los rumores), es 100% especulación. No hay tiempo para este tipo de cosas. Tengo contrato acá hasta 2029 y mi enfoque está solo en este club. Estoy muy orgulloso de estar acá”, afirmó, estableciendo desde el inicio una línea clara entre realidad y ruido externo.
El técnico insistió en que no existe ningún doble discurso ni una agenda paralela. “Mi atención se centra únicamente en este club y estoy muy orgulloso de estar aquí”, reiteró, antes de explicar cómo funcionan este tipo de versiones en el ecosistema mediático. “Pero, repito, es una especulación. Hace una semana, se me relacionaba con un puesto en Italia, en la Juventus”, recordó, evidenciando lo volátil que puede ser la narrativa alrededor de un entrenador de élite.
Para Guardiola, seguir ese hilo solo significa validar algo que no considera real. “Así que no le presto atención porque sé que no es cierto. Si seguimos hablando de eso, significa que le estoy prestando atención”, remarcó, dejando claro que su silencio o brevedad no son evasión, sino una decisión consciente.
El catalán reforzó ese mensaje cuando volvió a ser cuestionado antes de un compromiso clave. “Es importante entender el motivo por el cual esta noticia salió. No es mi trabajo, así que no me importa en lo absoluto”, dijo, antes de llevar el foco al vestidor. “Los jugadores están enfocados en Newcastle, no tengo nada que agregar”, sentenció, subrayando que cualquier distracción externa va en contra de la preparación deportiva.
Una visión de largo plazo sin fechas ni anuncios
Ya en un plano más reflexivo, Guardiola aceptó que la pregunta sobre su continuidad no es nueva. “En los últimos tres o cuatro años, cada vez que me preguntan por mi futuro, sí, tarde o temprano, a los 75 o 76 años, dejaré el Manchester City”, comentó con ironía, reconociendo que ningún ciclo es eterno.
Sin embargo, el técnico evitó asociar esa certeza natural con una salida cercana. “Aquí estoy ¿Qué va a pasar? ¡Quién sabe! ¿Quién sabe?”, lanzó, enfatizando que el fútbol no se rige por calendarios rígidos ni contratos blindados.
Guardiola cerró su postura con una reflexión que resume su manera de entender los proyectos deportivos. “Pero aunque tuviera un contrato de 10 años, o de seis meses, el fútbol cambia mucho”, explicó, antes de enviar un mensaje tanto al club como al entorno. “No estaré aquí para siempre, el club debe estar preparado, pero no es algo que esté sobre la mesa ahora mismo”.
El mensaje final es claro y coherente con toda su intervención: no hay una transición en marcha, no hay negociaciones ocultas y no hay urgencia por definir el mañana. Guardiola reconoce el futuro, pero gobierna desde el presente. Y mientras ese presente siga siendo competitivo, el ruido seguirá existiendo, pero no marcará el rumbo del Manchester City.


