Pilotos explotan contra el GP de Las Vegas: una ola de quejas por condiciones extremas
La lluvia y un trazado frío provocaron una sesión con agarre mínimo que desconcertó a toda la parrilla

- Verstappen explota por la clasificación en Las Vegas: “Era como manejar sobre hielo”
- Norris dice que la clasificación fue ‘estresante como el infierno’
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La clasificación del Gran Premio de Las Vegas dejó un escenario inusual: una ciudad donde casi nunca llueve se convirtió en el epicentro de una de las sesiones más complicadas de la temporada. Las precipitaciones, combinadas con las bajas temperaturas y la naturaleza urbana del trazado, provocaron una pista sin agarre que sorprendió incluso a los pilotos más experimentados.
Las rectas largas, las curvas pronunciadas y el constante reinicio de la superficie (que cada noche vuelve a abrirse al tráfico público) generaron una mezcla explosiva. La falta de temperatura en los neumáticos y los contaminantes del asfalto crearon una pista ‘grasosa’, difícil de leer y capaz de cambiar su comportamiento en cuestión de metros.
Las reacciones no tardaron en aparecer. Desde pilotos veteranos que aseguraron haber vivido una de las sesiones más estresantes de su carrera, hasta debutantes que aprovecharon la oportunidad para destacar, la parrilla quedó dividida entre quienes sufrieron y quienes encontraron ‘algo’ de disfrute en medio del caos. Estas fueron sus opiniones.
Pierre Gasly
Pierre Gasly fue uno de los pilotos que más sintió el impacto de las condiciones. Para él, la clasificación fue un ejercicio de supervivencia más que una prueba de velocidad. El francés explicó que la pista carecía por completo de agarre, obligándolo a manejar con una tensión constante y a tomar decisiones en fracciones de segundo para evitar un error.
“Las condiciones son una locura. El nivel de adherencia era bajísimo. No creo que vaya a dormir esta noche con la cantidad de adrenalina que todavía tengo”, aseguró.
Max Verstappen
El neerlandés, acostumbrado a brillar bajo la lluvia, reconoció que el escenario en Las Vegas fue distinto a cualquier otro que había experimentado. Verstappen explicó que, incluso en seco, el circuito suele ser poco estable por su superficie urbana, pero con lluvia se transformó en un reto casi imposible de disfrutar.
“Estaba realmente, realmente resbaladizo ahí fuera. En mojado no era divertido… se sentía como manejar sobre hielo. riesgas un poco más en la última vuelta, pero no estuvo cerca de ser suficiente para pelear por el primer lugar”.
Nico Hülkenberg
El piloto alemán recordó un momento que describe lo impredecible de la sesión: observar a Carlos Sainz arriesgar con neumáticos intermedios en un contexto donde apenas era posible mantener el coche en línea recta. Hülkenberg reconoció que la pista exigía cautela extrema y que cualquier exceso podía terminar en pérdida de control.
“La única manera en la que iba a salir era con neumáticos de lluvia extrema. Carlos salió con intermedios y estaba yendo a fondo… ¡me sorprendió que no perdiera el coche!”, recordó.
Ollie Bearman
Para Bearman, uno de los pilotos más jóvenes de la parrilla, la experiencia fue más que desafiante: fue inédita. El piloto de Haas explicó que nunca había enfrentado una situación tan crítica de agarre, ni siquiera en categorías inferiores, donde los escenarios suelen ser más cambiantes.
“Los peores que he experimentado en mi vida, en karting, F3, F2… en cualquier cosa”, afirmó.
Franco Colapinto
El argentino reforzó la percepción de que la pista estaba completamente fuera de control. Colapinto señaló que cada curva implicaba un riesgo real de perder el auto y que, desde los primeros minutos, el objetivo pasó de marcar tiempos competitivos a simplemente mantenerse dentro del asfalto.
George Russell
Russell ofreció una mirada más comparativa. Aunque admitió que Las Vegas presentó dificultades extremas, recordó que existe un parámetro aún más crítico: Turquía 2020, donde el reasfaltado volvió el circuito casi impracticable. Para él, Las Vegas estuvo cerca, pero no alcanzó aquel nivel de falta de adherencia.
Isack Hadjar
Hadjar vivió una experiencia opuesta a la mayoría. Como debutante bajo lluvia en un monoplaza de F1, encontró en la sesión una oportunidad para aprender y divertirse, incluso en medio de la incertidumbre. Sin embargo, lamentó no haber podido cerrar una vuelta limpia por una bandera amarilla tardía.
“Sinceramente, lo disfruté muchísimo… con los neumáticos de lluvia extrema fue muy divertido,” mencionó.
Lando Norris
El autor de la pole describió la sesión como una montaña rusa emocional. Norris explicó que cada curva representaba un riesgo enorme y que, más allá del control del auto, la presión de la última vuelta lo obligó a mantener la concentración al límite. También reconoció que no esperaba semejante caos al despertarse antes de la clasificación.
“Estuvo estresante, estresante como el infierno… cada curva sentías que podías estrellarte. Más satisfactorio un día como este porque fue un día difícil”.


