James Rodríguez, figura silenciosa en el triunfo ante Nueva Zelanda
El capitán de la Selección Colombia volvió a ser pieza clave en la victoria frente al equipo de Oceanía
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James Rodríguez volvió a firmar un partido destacado con la Selección Colombia. Esta vez, el capitán fue titular en el penúltimo amistoso de 2025 frente a Nueva Zelanda, donde aportó su talento, visión y experiencia en la victoria 2-1 de la ‘Tricolor’. Su influencia en el funcionamiento ofensivo fue evidente desde los primeros minutos.
La diferencia cuando James está… y cuando no
Aunque solo estuvo en el campo durante 65 minutos, su salida fue notoria. Sin James, Colombia perdió profundidad, precisión en los centros y claridad para conectar líneas. Su capacidad para acelerar o pausar el juego sigue siendo difícil de reemplazar en el esquema de Néstor Lorenzo.
Una de las cifras más contundentes para medir su impacto fue la precisión en los pases: James registró un 95% de efectividad, acertando 55 de los 58 que intentó. Números que reflejan su control del ritmo y su aporte constante en la generación de juego.
Pases claves que marcaron diferencia
Además de su precisión, Rodríguez realizó tres pases claves que derivaron en jugadas claras de peligro para Colombia. Una muestra más de su capacidad para desequilibrar y encontrar soluciones incluso en espacios reducidos.
Según la plataforma especializada Sofascore, James fue uno de los futbolistas mejor valorados del partido con una calificación de 7.7, ubicándose entre las notas más altas de la Selección. Un respaldo estadístico a su influencia futbolística.
No todo fue perfecto: James registró dos remates a puerta, pero también perdió 13 veces la posesión, uno de los puntos más bajos de su presentación. Aun así, su participación siguió siendo determinante para la creación ofensiva del equipo.
Aunque no marcó ni asistió en esta ocasión, el encuentro volvió a dejar clara la importancia de James en la Selección Colombia. Cuando viste la ‘Tricolor’, su nivel se eleva y su influencia es evidente, consolidándose como una pieza fundamental en el proceso de Néstor Lorenzo rumbo al Mundial de 2026.
