El 2025 de Verstappen: caída, reconstrucción y una remontada que lo dejó a dos puntos del pentacampeonato
Inicio irregular, colapso en Europa y una remontada de 104 puntos definieron un 2025 que terminó con Verstappen a dos unidades de hacer historia.

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El 2025 de Max Verstappen será recordado como la campaña que cerró una hegemonía iniciada en Abu Dhabi 2021 y sostenida durante cuatro temporadas consecutivas. El neerlandés llegó a la campaña como tetracampeón defensor y mantuvo su lugar entre los contendientes hasta la última vuelta del año,
Pero la combinación de un inicio que no marcó distancia, una gira europea que lo dejó contra las cuerdas y la recuperación tardía del equipo lo obligaron a escalar una montaña que terminó dos puntos por encima de su alcance. En Yas Marina ganó desde la pole y cumplió con su parte, pero el tercer lugar de Lando Norris definió el título por el margen más estrecho posible. El británico cerró el año con 423 unidades; Verstappen se quedó en 421.
Inicio sólido que no marcó diferencias
El arranque de temporada dio la impresión de continuidad. Verstappen ganó en Japón e Imola, mantuvo a Red Bull en la conversación y sostuvo un ritmo competitivo que, en otros años, habría sido suficiente para imponer tendencia. Sin embargo, el contexto de 2025 fue distinto desde las primeras fechas.
McLaren llegó con una dupla consolidada y una estructura capaz de presionar de manera constante. Norris y Piastri tomaron el control desde la clasificación, con cuatro poles consecutivas y una secuencia que les permitió capturar 12 de las primeras quince 15 del año. La escudería Papaya se adueñó del Mundial de Constructores con seis carreras de anticipación, y Verstappen quedó obligado a evitar cualquier tropiezo si quería sostener el pulso del campeonato.
Europa y el derrumbe estructural

La gira europea se convirtió en el tramo que definió el rumbo del año. Verstappen sumó un punto en España tras un incidente con George Russell, quedó fuera en Austria luego de chocar con Kimi Antonelli, añadió diez unidades en Silverstone y sólo dos más en Hungría. El golpe definitivo llegó en Zandvoort. En su carrera de casa la diferencia alcanzó cifras que parecían insalvables: 104 puntos de distancia respecto a Oscar Piastri y 70 frente a Norris. El propio piloto reconoció sentirse fuera de la pelea al volver del fin de semana.
El problema no fue una sola carrera, sino la incapacidad de Red Bull para acompañar a su piloto. Para recortar la desventaja, Verstappen necesitaba resultados perfectos y, al mismo tiempo, un escenario en el que dos rivales directos cedieran puntos con frecuencia.
El resurgimiento técnico y la remontada de 104 puntos
El cambio de tendencia llegó tras el parón de verano. Red Bull introdujo mejoras que estabilizaron el comportamiento del coche y devolvieron a Verstappen un nivel de confianza que no había tenido en la temporada. El impacto fue inmediato: Monza marcó el reinicio de su campaña, con victoria desde la pole y el comienzo de una racha de nueve podios consecutivos. En ese tramo final ganó seis carreras y puso a McLaren contra las cuerdas.
Desde Zandvoort hasta Abu Dhabi, Verstappen sumó 108 puntos más que Piastri y 58 más que Norris. Empató al australiano en Las Vegas, impulsado por la doble descalificación de McLaren, y se acercó de forma decisiva en Qatar, donde la estrategia fallida del equipo de Woking durante el Safety Car permitió que tomara el control de la carrera.
La combinación de su consistencia, las victorias en Italia, Azerbaiyán, Estados Unidos, Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi, y los tropiezos de McLaren transformó un déficit de tres cifras en una definición de dos puntos.
Abu Dhabi: la victoria insuficiente y el cierre de una era

La última carrera del año planteó un escenario sin margen: Verstappen necesitaba ganar y que Norris terminara cuarto o peor. Cumplió con lo primero con la precisión que lo ha caracterizado durante su etapa dominante, asegurando la pole y liderando de punta a punta para llegar a ocho triunfos en el año, la cifra más alta de la parrilla. Sin embargo, Norris ejecutó la carrera que requería. El británico aseguró el tercer lugar y mantuvo la ventaja mínima necesaria para coronarse.
El piloto más ganador del año no se llevó el título, y el campeón del mundo no lideró el rubro de triunfos. La temporada se definió por la regularidad en las semanas en las que Verstappen no tuvo cómo responder, un tramo que terminó pesando más que su extraordinario cierre de campaña.
Fin de la hegemonía y el inicio de una nueva rivalidad
El 2025 marca el final de la racha de cuatro títulos consecutivos que comenzó y terminó en Yas Marina. Verstappen cierra el año con ocho coronas, a dos puntos de un pentacampeonato que lo habría puesto junto a Michael Schumacher como los únicos en lograrlo.
Max estuvo a 104 puntos del liderato en agosto y llegó a Abu Dhabi con opciones reales de ser campeón. Ganó más carreras que cualquier rival y condujo, durante tres meses, con la exigencia de no fallar. El título terminó del lado de McLaren, pero la temporada dejó grandes emociones rumbo a 2026, donde las nuevas regulaciones podrían cambiar el panorama por completo.


