Antigua GFC celebra el bicampeonato con su gente
La caravana recorrió las principales calles del casco histórico, acompañada por cientos de seguidores vestidos de verde y blanco.

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Antigua GFC cerró el Torneo Apertura 2025 con una consagración histórica, pero sin poder celebrar en el lugar donde aseguró el título. El conjunto colonial se proclamó bicampeón de la Liga Nacional tras imponerse 2-1 en el marcador global ante Municipal, luego de caer 1-0 en el partido de vuelta disputado en el estadio Manuel Felipe Carrera, un escenario marcado por la tensión tras el pitazo final.
El equipo dirigido por Mauricio Tapia sostuvo la ventaja obtenida en la ida, jugada en el Estadio Pensativo, y confirmó su sexto campeonato de liga, el primero logrado de manera consecutiva. Durante los 90 minutos finales, Antigua mostró orden y resistencia para neutralizar los intentos de los rojos, que no lograron revertir la serie pese al apoyo masivo de su afición.
Festejos trasladados a la ciudad colonial
Sin embargo, la celebración no pudo desarrollarse en El Trébol. Al finalizar el encuentro se produjeron incidentes dentro del campo de juego que obligaron a los futbolistas de Antigua GFC a retirarse rápidamente a los camerinos. La invasión de algunos aficionados y los altercados entre jugadores impidieron cualquier festejo formal en el estadio y dejaron una imagen que generó críticas en el entorno del fútbol guatemalteco.
Ante ese contexto, la celebración se trasladó completamente a la ciudad de Antigua Guatemala. Allí, el plantel, el cuerpo técnico y la afición panza verde se reencontraron para dar forma a los festejos que no pudieron concretarse en la capital. La caravana recorrió las principales calles del casco histórico, acompañada por cientos de seguidores vestidos de verde y blanco.
La Plaza Mayor se convirtió en el punto de encuentro para los hinchas coloniales, que aguardaron al equipo para compartir el logro. Familias completas, niños y adultos mayores participaron de una celebración que se desarrolló de forma ordenada y con un fuerte sentido de pertenencia al club.
El trofeo del bicampeonato fue exhibido ante la afición, que respondió con cánticos y aplausos en reconocimiento a un plantel que marcó una etapa relevante en la historia de la institución. El ambiente contrastó con lo ocurrido horas antes en el estadio, mostrando otra cara del cierre del torneo.
Mauricio Tapia, protagonista central del ciclo, sumó un nuevo título a su etapa en Antigua GFC y reforzó su lugar como el entrenador más exitoso del club. El festejo en la ciudad fue también una forma de reconocimiento a su trabajo y al proyecto deportivo sostenido.
Así, Antigua GFC celebró su bicampeonato lejos del campo donde lo aseguró, pero cerca de su gente. La ciudad colonial fue el escenario final de una coronación que ya quedó registrada en la historia del fútbol guatemalteco.


