Los jugadores que podrían cambiar de nacionalidad para el Mundial 2026
Fidalgo, Marcelo Flores, Barnes, Hudson-Odoi y Nketiah encabezan la lista de jugadores que podrían cambiar de selección rumbo a 2026

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El Mundial de 2026 se acerca y varias selecciones ya analizan posibles incorporaciones mediante cambios de nacionalidad, un fenómeno que ha crecido al ritmo de la globalización del fútbol y de los procesos migratorios que han moldeado la carrera de muchos jugadores. La combinación entre doble nacionalidad, trayectorias internacionales inconclusas y oportunidades deportivas abre la puerta a que ciertos futbolistas puedan competir en la justa mundialista bajo una bandera distinta a la de sus primeras convocatorias.
En este ciclo, México, Canadá, Escocia y Ghana encabezan la lista de federaciones que podrían sumar refuerzos gracias a mecanismos reglamentados por la FIFA, ya sea por medio de la residencia, la ascendencia familiar o el conocido one-time switch. Cada caso reúne particularidades deportivas, legales y emocionales que explican por qué algunos jugadores están listos para cambiar de federación, mientras otros aún evalúan si dar el paso en un año decisivo rumbo a la Copa del Mundo.
Las reglas para cambiar la nacionalidad
Para que un jugador pueda representar a una nueva selección, la FIFA exige primero que cumpla con los requisitos de nacionalidad establecidos por el propio país. Sin embargo, contar con el pasaporte no basta: el futbolista debe acreditar un vínculo deportivo válido según el reglamento internacional. Ese vínculo puede generarse de cuatro formas: nacimiento en el territorio, ascendencia directa por padres o abuelos, o residencia continua durante un periodo mínimo de cinco años.
Cuando un futbolista ya representó a otra selección, el proceso cambia y entra en juego el llamado one-time switch, un mecanismo que permite cambiar de federación una única vez en la carrera. Esta vía está disponible para quienes hayan jugado únicamente amistosos o para aquellos que, aun con partidos oficiales, cumplan tres condiciones simultáneas: haber disputado un máximo de tres encuentros competitivos, haberlos jugado antes de cumplir los 21 años y que hayan pasado al menos tres años desde su última participación. Si el jugador cumplió alguno de esos criterios fuera de esos márgenes —como debutar en un torneo mayor o jugar eliminatorias después de los 21— el cambio queda bloqueado de manera definitiva.
Una vez que el futbolista cumple con los requisitos, la federación interesada debe enviar la solicitud a FIFA con la documentación que acredite nacionalidad, residencia y el historial oficial del jugador. El organismo revisa caso por caso y, si aprueba el cambio, lo registra como irreversible. A partir de ese momento, el jugador queda habilitado de inmediato para ser convocado.
Álvaro Fidalgo | México

Álvaro Fidalgo ya cumplió el primer paso para vestir la camiseta de la selección mexicana: la obtención de la ciudadanía. Sin embargo, su debut todavía no puede concretarse debido a la normativa de FIFA, que exige no solo la nacionalidad sino también cinco años consecutivos de residencia en el país. El mediocampista del América llegó a México en enero de 2021, por lo que alcanzará ese requisito hasta febrero de 2026. A partir de entonces quedará plenamente habilitado para ser registrado por la FMF y, en consecuencia, elegible para Javier Aguirre en la siguiente convocatoria oficial.
Por calendario, todo apunta a que su primer llamado podría producirse en la Fecha FIFA de marzo de 2026, periodo en el que México enfrentará a Portugal y Bélgica como preparación rumbo al Mundial. Su reciente interacción con aficionados, incluida la firma de una camiseta del Tri y un enigmático “ya veremos”, reforzó la expectativa en torno a su incorporación. En lo deportivo, Fidalgo mantuvo regularidad con América en el Apertura 2025, y la combinación entre su rendimiento, su estatus de naturalizado y la aprobación del técnico determinará si el mediocampista debuta con México.
Marcelo Flores | Canadá

Marcelo Flores, mediocampista de Tigres, fue convocado por Jesse Marsch al campamento de concentración de la selección canadiense durante la Fecha FIFA de noviembre. Aunque suma tres apariciones con México, sigue siendo elegible para representar a su país natal rumbo al Mundial de 2026. Su único partido oficial con el Tri fue en la Nations League de Concacaf en julio de 2022, por lo que cumple plenamente con los requisitos para solicitar el one-time switch: disputó menos de tres encuentros oficiales, su última participación ocurrió antes de los 21 años y ya transcurrieron más de tres años desde aquel registro.
Aun así, su incorporación definitiva al equipo de la hoja de maple no está garantizada. Marsch lo integró como sparring durante el parón internacional, etapa en la que Canadá empató con Ecuador y venció a Venezuela, buscando observarlo de cerca sin comprometer una decisión inmediata. La realidad deportiva del jugador tampoco facilita el panorama: en el Apertura 2025 solo participó en cinco partidos de Liga MX, con dos titularidades y un gol. Si desea competir por un lugar en la lista final, deberá recuperar protagonismo con Tigres en el próximo semestre o explorar una salida en el mercado invernal que le asegure minutos consistentes.
Harvey Barnes | Escocia

Escocia aseguró su primera clasificación a la Copa del Mundo desde Francia 1998. Con futbolistas de la élite europea como Scott McTominay y Andy Robertson, la selección británica buscará romper su maldición y superar la fase de grupos por primera vez en nueve intentos. Para lograrlo, el equipo de Steve Clarke podría contar con un refuerzo desde el Newcastle United. Harvey Barnes mantiene abierta la posibilidad de representar a la selección escocesa gracias a la vía de sus abuelos maternos. Su única aparición con Inglaterra ocurrió en un amistoso en 2020, un detalle que le permite cambiar de federación si así lo decide.
Pese a ello, Barnes insiste en que no ha entablado conversaciones formales ni con la FA ni con la Scottish FA, subrayando que su atención inmediata está en recuperar la estabilidad competitiva del Newcastle en una temporada irregular para el equipo de Eddie Howe. En Escocia, el debate gira entre la ilusión por sumar a un atacante de nivel Premier League y la cautela de integrar a un futbolista que no formó parte del proceso clasificatorio. Aun así, el nivel actual de Barnes, con un perfil que combina velocidad, desborde y definición, lo convierte en un refuerzo tentador.
La decisión final dependerá de si Barnes percibe que aún tiene opciones con Inglaterra o si, ante la realidad competitiva, opta por una oportunidad única con Escocia rumbo al verano de 2026. Pero la elección no recae solo en el futbolista: Steve Clarke también deberá determinar si vale la pena incorporarlo a un grupo que ha trabajado unido durante todo el ciclo y que acaba de lograr una clasificación histórica.
Callum Hudson-Odoi y Eddie Nketiah | Ghana

A lo largo de su historia Ghana ha buscado incorporar a futbolistas nacidos y formados en el extranjero, una estrategia que ha marcado distintas etapas de la selección. Casos como Kevin-Prince Boateng, Iñaki Williams o Tariq Lamptey ilustran cómo el país ha sabido aprovechar su diáspora futbolística para complementar el talento local y competir en torneos de élite.
En este proceso, Eddie Nketiah y Callum Hudson-Odoi se han convertido en el epicentro de un debate que atraviesa al fútbol ghanés rumbo al Mundial de 2026. Ambos fueron formados en Inglaterra, llegaron a tener presencia en las juveniles y obtuvieron minutos con la selección absoluta, pero sin consolidarse. Esa falta de continuidad ha reabierto la conversación sobre un posible cambio de federación, una idea que vuelve cada ciclo mundialista y que, esta vez, coincide con la clasificación de Ghana y un plantel que ha mostrado cohesión y progreso bajo Otto Addo.
El entrenador, sin embargo, se ha mostrado inflexible: dejó claro que quienes rechazaron al país cuando se les buscó por primera vez no tendrán una vía rápida para entrar, y que evaluar su compromiso será indispensable para no romper la unidad que llevó al equipo a una segunda Copa del Mundo consecutiva.
Una parte de la afición percibe a Nketiah y Hudson-Odoi como talentos valiosos capaces de elevar el nivel del ataque y formar una unidad desequilibrante junto a Antoine Semenyo y Mohammed Kudus. Pero otra parte rechaza la idea de recibir jugadores que no formaron parte del proceso clasificatorio. Addo insiste en priorizar a quienes ya demostraron lealtad al proyecto y la decisión final dependerá tanto de si los jugadores están dispuestos a comprometerse plenamente con Ghana como de si el cuerpo técnico considera que su llegada fortalecería al grupo sin alterar el equilibrio que ha caracterizado esta etapa de reconstrucción.
Saint-Maximin y Dewsbury-Hall rechazan el cambio

En el caso de Allan Saint-Maximin, el atacante del América tuvo que enfrentar una ola de especulaciones que lo colocaban como potencial refuerzo de Haití, país de origen de su padre. Ante la clasificación histórica de los caribeños al Mundial, la idea ganó tracción, pero el propio jugador se encargó de desmentir los rumores.
En un mensaje en redes sociales, celebró la hazaña haitiana y expresó admiración por el proceso, pero subrayó que no existe ninguna gestión ni intención de representar a Haití, insistiendo en que los protagonistas del boleto mundialista son los jugadores que lo consiguieron en la cancha.
El caso de Dewsbury-Hall tuvo un trasfondo distinto, pero un desenlace similar. El mediocampista del Everton, inglés de nacimiento y elegible para Irlanda por su ascendencia, había sido mencionado como posible refuerzo para la selección, en medio de una etapa deportiva complicada para el equipo. Incluso existieron contactos preliminares, pero el jugador prefirió no prolongar la incertidumbre.
En una entrevista con Everton TV, dejó claro que su aspiración es ganarse un lugar en la selección inglesa y que aceptar una convocatoria de Irlanda “no se sentiría correcto”. El Ejército Verde aún no tiene su lugar asegurado en la justa veraniega. Sin embargo, podría disputar su cuarta edición a través del repechaje europeo, donde enfrentará a Chequia.


