La dura confesión de Victor Wembanyama: “El básquetbol dejó de ser mi prioridad”
El francés habló sobre la trombosis venosa profunda que sufrió en el hombro derecho y que le provocó una crisis existencial desde febrero pasado
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Victor Wembanyama rompió el silencio sobre la trombosis venosa profunda que le fue diagnosticada en febrero en el hombro derecho, una condición médica que lo obligó a detenerse y a replantearse seriamente su futuro en el básquetbol, a pesar de que el pívot francés aparece como una de las grandes figuras de la NBA, tanto por su impacto inmediato en la duela como por las altas expectativas que rodean su carrera a largo plazo.
Este 2025 no ha sido sencillo para el basquetbolista galo, ya que en febrero recibió un diagnóstico que puso su carrera profesional en la cuerda floja e incluso representó una amenaza para su vida, una situación que le provocó una profunda crisis existencial al presentarse en una etapa temprana de su trayectoria en el básquetbol de élite.
Con apenas 21 años, Victor Wembanyama mantiene su ascenso como uno de los basquetbolistas más relevantes del deporte ráfaga y, tras su recuperación, todo indica que regresa con fuerza, aunque recientemente realizó una confesión que evidenció el estado anímico en el que se encontraba durante ese complicado periodo.
“Fueron cinco minutos de colapso total. Obviamente, lloré mucho y sentí mucha tristeza. De repente, el básquetbol dejó de ser mi prioridad. En ese momento es cuando tienes que tomar medidas rápidamente y desgraciadamente tienes que tomar decisiones”, declaró Victor Wembanyama en una charla para ESPN.
Victor Wembanyama admite que su problema médico le cambió la vida
Después de participar en el fin de semana del All-Star, Victor Wembanyama fue diagnosticado con una trombosis venosa profunda en el hombro derecho, una complicación que lo obligó a detener por completo su actividad deportiva durante varios meses. El panorama inicial generó preocupación, pero desde el primer momento el cuerpo médico se mostró optimista respecto a su evolución. Con el paso del tiempo, esas previsiones se confirmaron, ya que el jugador francés respondió de manera positiva al tratamiento y avanzó de forma constante hasta encaminarse hacia una recuperación total.
“Sentí miedo, sí. Pero no fue justificado. Necesitaba tiempo para encontrarme de nuevo a mí mismo y entonces mejorar. Fue simplemente mi motor durante todo el verano y creo que lo será para el resto de mi carrera. Es el mejor ejemplo de que la vida es corta, la carrera es corta y que puede terminar en cualquier momento. Así que no hay tiempo que perder”, sentenció.
