La Roma impone jerarquía ante el Celtic y se encarrila en la Europa League
Con gol en contra de Liam Scales y el doblete de Evan Ferguson, la ‘Loba’ triunfa en el Celtic Park.
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Una gran exhibición en el mítico Celtic Park. La Roma necesitó una noche así para seguir soñando con el boleto directo a los octavos de final de Europa League, derrotando a un histórico del fútbol europeo. Los de Gianpiero Gasperini derrotaron por 0-3 al rival escocés en su propia casa, sellando un golpe de autoridad en el cierre de la sexta fecha.
Fue una paliza que pudo tener más goles para ambos lados. Los offside, así como un penal errado de la localía, no permitieron que el pleito sobrepasara las tres dianas. De todas maneras, el cuadro capitalino de Italia se frotó las manos al tocar la puerta de la clasificación directa. Necesitará revalidar lo hecho en las próximas dos jornadas de enero.
La Roma fue un verdadero huracán en el inicio del partido. Presionó alto ante las débiles salidas del elenco anfitrión, blanco de recriminaciones por parte de la afición en una temporada irregular. Sin embargo, el primer gol llegaría a través de la pelota parada.
El Celtic vivió una pesadilla en su casa
Liam Scales, sobre los 6 minutos, envió el balón en su propio arco luego de un buen centro arriba de Matías Soulé en un vértice. Parecía llegar Mancini a la cita con el balón, pero le ganó en las alturas el central irlandés, quien empujó de cabeza y liquidó a Kasper Schmeichel.
Después de cuatro llegadas muy claras a gol, por fin logró convertir Evan Ferguson, el hombre más incisivo y protagonista en los escenarios ofensivos de la Roma. A los 36 minutos, cuando el panorama se tornó más oscuro para Celtic, el ariete se puso el overol con un fulminante anticipo. Tras la cabalgata entre Soulé y Zeki Celik, este último metió el centro para el derechazo soberbio.
La Roma se envalentonó y ni bajó el acelerador. Ferguson repitió la dosis antes de cerrar el primer episodio. Ahora desde la izquierda, con una construcción previa y el pase en diagonal de Soulé, pegó la vuelta y desenfundó con jerarquía. Bajó el balón y definió con botín derecho a un rincón.
El Celtic pudo descontar. Un agarrón infame de Mario Hermoso sobre Arne Engels se convirtió en pena máxima. El propio delantero ejecutó erradamente, pues la esférica impactó en el palo. No salía nada, ni un gol de Kelechi Iheanacho que pudo cambiar el rumbo del partido, pero el fuera de lugar negó posibilidades de ilusión.
La Roma bajó la guarda. Salvó otra acción anulada de Leon Bailey, quien convirtió el hipotético cuarto gol, no ocurrió nada en el segundo tiempo. Las gradas se vaciaron y la Roma festejó un triunfo valioso. Por ahora, suma 12 puntos y queda a una sola unidad de llegar a la zona directa a octavos de final. El Celtic, por su parte, complica las aspiraciones al descender al sótano de los playoffs.
